El proyecto Debabarrena Berritzen fue testigo el viernes de la la entrega de diplomas a las alumnos que han finalizado este programa de formación y orientación laboral destinado a jóvenes en situación de desempleo.
El proyecto compagina la formación con una actividad práctica que, en este caso, se ha materializado con la ejecución de proyectos de reforma integral de inmuebles públicos situados en Soraluze y Elgoibar.
La entrega de los diplomas, con la que se acreditó el final de su formación, tuvo lugar en un encuentro que contó con la participación las entidades que han impulsado el proyecto: los Ayuntamientos de Soraluze y Elgoibar; el departamento de Planificación Territorial y Agenda Urbana de Gobierno Vasco; el Departamento de Economía, Trabajo y Empleo de Gobierno Vasco; la Diputación Foral de Gipuzkoa; Lanbide; Debegesa; Edukeibar; y Kalexka.
Desempleados de 16 a 30 años
El acto sirvió para hacer un recorrido por una iniciativa que tres ideas básicas tenía como punto de partida : formación, orientación y contratación. Estas tres ideas ha sido el eje de un proyecto en el que tres chicas y 21 chicos con edades comprendidas entre los 16 y 30 años han disfrutado de un contrato de formación de 10 meses en el que se han capacitado en albañilería, colocación de pladur, falsos techos y suelos, y aislamiento de interiores y exteriores.
Este aprendizaje se ha visto acompañado de formación en otros campos como pintura, fontanería, carpintería y electricidad que les han aportado competencias que facilitarán su inserción en el mercado laboral.
Tres fases de formación
El programa Debabarrena Berritzen se inició con una primera fase en la que los jóvenes adquirieron una serie de habilidades, hábitos y competencias para poder adaptarse a recursos formativos y laborales que se desarrolló en Soraluze.
Superada esta fase y sentadas las bases que iban a definir la forma de encarar el proyecto, tocó dotarse de conocimientos técnicos. Los jóvenes afrontaron una fase de formación , acompañada de una beca económica, que les permitió obtener el Certificado de Profesionalidad de Operaciones Básicas de Revestimientos
El cierre del proceso llevó a estos 24 jóvenes a poner en práctica lo aprendido en las fases previas a lo largo de un periodo de 10 meses en el que han contado con un contrato de formación en alternancia que les ha llevadoa reformar dos inmuebles de titularidad municipal en Soraluze y Elgoibar.
Inmuebles reformados
El resultado final de todo este proceso tiene su reflejo ahora en el espacio público de Olaldea en Soraluze y en el Centro Social de Sigma en Elgoibar, donde los jóvenes que han participado en el programa han tenido que hacer gala de todos los conocimientos adquiridos para poner en condiciones de uso ambos locales.
Olaldea ya ha sido homologado por Lanbide, que va a aprovechar ese espacio para el desarrollo de diferentes programas en el ámbito de la construcción, limpieza y el comercio, entre otros. El local cuenta con espacio de servicios, almacén, vestuarios, salas de profesorado y despacho, así como con varias aulas de formación. El conjunto se completa con una amplia zona de taller para impartir formación práctica.
Por su parte, en el Centro Social de Sigma en Elgoibar se ha realizado una reforma de varios espacios, con la colocación de aislamiento térmico por el exterior (SATE) y por la cara interior en envolvente. También se han reparado fisuras y desconchados fruto de la humedad, se ha pintado el centro, y se han colocado techos y suelos. En definitiva, se ha mejorado la eficiencia energética y el confort necesarios para poder aprovechar el espacio para usos formativos y comunitarios.
Actualmente, los locales acondicionados en Sigma albergan la oficina de proximidad Olasogain Opengela. Se trata de un punto de información, difusión y participación abierto a atender las demandas y resolver las dudas de las comunidades de vecinos y otros agentes implicados, de una manera u otra, en el proceso de rehabilitación del barrio de Sigma que se está llevando a cabo en estos momentos.
Balance positivo
Elena Alonso, responsable del departamento de Empleo e Innovación Social de Debegesa, destacó durante su intervención el modelo de gobernanza colaborativa que sustenta este proyecto.
Jon Zubiaurre, concejal de Urbanismo en el Ayuntamiento de Elgoibar, incidió en la importancia del trabajo en común entre las instituciones y no dudó en afirmar que “Debabarrena Berritzen es un claro ejemplo de éxito y de como podemos ofrecer formación específica a jóvenes para integrarlos en el mercado laboral tomando esa colaboración como eje de actuación”.
El alcalde de Soraluze, Unai Larreategi, también destacó las bondades de la iniciativa. “Proyectos como este no solo fomentan la inserción laboral de jóvenes en desempleo, cubriendo necesidades reales de mano de obra, sino que también ayudan a regenerar espacios urbanos que lo requieren, como ha sucedido con Olaldea. Desde el Ayuntamiento de Soraluze continuaremos trabajando en colaboración con las administraciones y entidades sociales para desarrollar nuevas iniciativas que promuevan estos valores y objetivos”, manifestó en el acto de entrega diplomas a los jóvenes que han participado en el programa Debabarrena Berritzen.