Cerca de ocho millones de euros, de los algo más de 12,6 millones que arroja la liquidación del presupuesto de 2023, se destinarán a costear el desembolso económico en infraestructuras al que hará frente el Consistorio arrasatearra en los próximos años. “Tenemos por delante inversiones con alto riesgo de endeudamiento, entre las que se figuran las obras, a corto plazo, de la renovación del polideportivo Iturripe y la reforma integral del Amaia antzokia, además del nuevo polideportivo de Musakola, en este caso a medio plazo.

Gestión prudente

Debemos realizar una gestión prudente y es, por ello, que reservaremos casi ocho millones de euros para hacer viables estos proyectos”, explican desde el Gobierno municipal.

Imagen del nuevo complejo de Musakola. 2 Anabel Dominguez

De este remanente de tesorería, 2.568.370 euros se incorporan a las cuentas públicas de este año para financiar distintas actuaciones, o engordar las partidas de proyectos ya contemplados. Esta decisión fue ratificada en el Pleno celebrado el martes con los votos del equipo de Gobierno.

Así, a las obras para adecuar la oficina del BAZ al nuevo modelo de atención a la ciudadanía se asignan 200.000 euros; 300.000 se inyectan en la estabilización del talud de la Cerrajera; 95.000 en la reparación del frontón de Antoña, y 40.000 en la redacción del proyecto de reurbanización del Grupo San Juan. El nuevo gaztetxoko de Musakola recibe 120.000 euros, y 100.000 la colocación de aparcamientos para bicis.

Asimismo, la partida para reparar y acometer inversiones en instalaciones deportivas aumenta en 139.500 euros (un total de 239.500); en 15.000 euros hace lo propio la dedicada a fomentar las actividades turísticas, y en 50.000 la consignada para reformar los parques infantiles. Sobre estos últimos, el portavoz del Gobierno, Kepa Urteaga, indicó que están estudiando la posible cubrición y renovación del área de juegos de la plaza Biteri, incluida la zona de la pérgola, cuyo cubierta está en mal estado.

Subida un 3% de tasas

Uno de los puntos más debatidos de la sesión fue el del incremento del 3% de las tasas de los cursillos deportivos, el euskaltegi y la escuela de medio ambiente de cara al curso 2024-2025. EH Bildu y Elkarrekin se quedaron solos en la aprobación de la propuesta, que el PNV volvió a criticar, al igual que hizo públicamente hace unos días. De hecho, presentó una enmienda a la totalidad que no salió adelante.

El portavoz jeltzale, Ander Garay, tildó de “injusta, incomprensible e inaceptable esta subida de las tasas a las y los arrasatearras, cuando el Ayuntamiento se encuentra en una situación de deuda cero, con un remanente de casi trece millones de euros y, por tanto, con capacidad financiera”. El PSE-EE también votó en contra.