Un total de 31 almacenes de hostelería de la Parte Vieja de Donostia funcionan sin licencia para esta actividad, según aseguró ayer en un comunicado Parte Zaharrean Bizi, que recordó que el pasado mes de julio envío al Ayuntamiento un listado de almacenes hosteleros que, según sus informaciones, carecían de permiso, por lo que reclamaban que el Consistorio los inspeccionara.
El pasado mes de enero, el Ayuntamiento “ha comprobado que 31 locales desarrollan su actividad sin licencia”, dijo Parte Zaharrean Bizi. “¿Se han cerrado los locales hasta que se legalicen? No. Se siguen utilizando como almacenes”, criticó la entidad vecinal.
Asimismo, destacó su preocupación por el hecho de que “el Ayuntamiento no sepa qué elementos se encuentran conectados a la red eléctrica en esos locales, ni cuál es la actividad que se realiza, en un barrio donde las casas tienen estructuras de madera”.
El listado enviado por Parte Zaharrean Bizi al Consistorio citaba unos 40 locales que ejercen como almacenes para hostelería y los que se han revelado sin licencia son 31, por lo que sólo uno de cada cuatro funciona con el permiso correspondiente.
Los datos fueron dados a conocer al hilo del último incendio registrado en un bar de la Parte Vieja esta misma semana, un siniestro que provocó daños en el inmueble y el desalojo de los residentes hasta la reinstauración de los servicios de la vecindad, como el agua, la electricidad y el gas.
Parte Zaharrean Bizi destacó “la preocupación, desconsuelo, temor y hartazgo de vecinos y vecinas afectados por los incendios ocurridos en la Parte Vieja” y lamentó que el alcalde, Eneko Goia, respondiera a los informadores que el Ayuntamiento sí lleva a cabo inspecciones en los locales hosteleros para comprobar que las cocinas cumplen las normativas, aunque sin ofrecer datos.
Además, la entidad aseguró que en los últimos tiempos se han presentado denuncias sobre peligro y seguridad en establecimientos de hostelería. En uno de los casos no reciben información sobre la situación y en otro, sobre “una chimenea que presenta orificios y grietas” desde el año 2022, se permite el funcionamiento, antes de que se apliquen las medidas correctoras, se queja Parte Zaharrean Bizi, que critica la postura municipal.
