La rescisión del contrato para la finalización del dique del puerto entre FCC y el Gobierno Vasco ha reactivado el contencioso que enfrenta a parte de los vecinos de la localidad con este proyecto. La noticia ha dado lugar a una serie de encuentros en los que se han vuelto a poner sobre la mesa su futuro y el papel que debe jugar la ciudadanía en su desarrollo. El primero tuvo lugar en el Gaztetxe el domingo y contó con la participación de una treintena de personas. Entre los asistentes estuvieron un concejal de EH Bildu y representantes de Berdeak-Equo y el PSE-EE. El encuentro tuvo carácter informativo y no se llegó a adoptar ninguna decisión concreta.

La siguiente cita se llevará a cabo el 21 de diciembre y, en este caso, tendrá como protagonistas a EH Bildu. La formación que ostenta la Alcaldía de la localidad ha hecho un llamamiento a sus miembros para determinar los pasos a dar ante el nuevo escenario generado con la rescisión del contrato y la paralización del proyecto a la espera de una nueva adjudicación. EH Bildu, tal y como se señala en la convocatoria, asumió en mayo que las obras para la finalización del dique iban a llevarse a cabo. Su reto, señala, era “aunar fuerzas para impulsar un proceso participativo para decidir qué hacer en la lámina de agua exterior”. Sin embargo, la paralización del proyecto ha hecho saltar por los aires esta idea, a tenor de lo que se deduce de la convocatoria. “La situación ha cambiado. Con el final del contrato y la paralización de las obras, este pueblo tiene la oportunidad de poner sobre la mesa el proyecto que quiere y le da al Gobierno Vasco la ocasión de dejar a un lado otros intereses y hacer posible el deseo de los ciudadanos”.