El calor fue este sábado el primero en salir y el último en volver a casa. Fue, sin duda, el invitado de honor al Euskal Jai eguna, una jornada con la que Zarautz puso el broche a toda una semana de fiestas vascas. Pero el calor no fue el único invitado a pasarlo bien: trikitixas, txistularis y dulzaineros pusieron a bailar al personal, mientras que la sidra y el txakoli fueron los principales encargados de hidratar la fiesta. Los abanicos y las sombrillas también decidieron unirse al jolgorio, y es que aunque no entran dentro del outfit del traje de baserritarra, ayer era imposible sobrevivir sin ellos. De hecho, el calor hizo que las licencias en la vestimentas fueran muchas.

La fiesta, como el calor, fue madrugadora y, para las 7.00 horas, la diana recorría las calles de la localidad, poniendo la banda sonora al desayuno. Apenas una hora después, comenzó la actuación del grupo Goiztarrak (grupo teatral que recupera antiguas costumbres, representando por las calles a personajes de antaño). Para esa hora las calles ya estaban llenas de zarauztarras y visitantes que, motivados por el espléndido día, se preparaban para disfrutar de una jornada festiva.

A las 12.00 horas llegó el turno del grupo local Alproja. Un total de 40 vecinos llevaban semanas preparando la actuación que ayer pudieron exhibir por fin.

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Zarauzko Euskal Jaia, sargoripean! Arnaitz Rubio

Concurso de carrozas

Las carrozas son parte de la historia del Euskal Jai eguna en Zarautz. Están preparadas con antelación y con mimo por cada kuadrilla, dejando en ellas su seña de identidad para después lucirlas por la calle.

El Ayuntamiento lleva organizando este concurso desde 2016. A las 13.30 horas, en Lege Zaharren enparantza, arrancó un certamen que acabó venciendo la cuadrilla de Julen Manterola, con su carroza reconvertida en sidrería. El segundo puesto fue a parar a la cuadrilla de Theila Ilarramendi y el tercer puesto para Iñigo Arrillaga. Se da la circunstancia de que este último ha ganado todos los concursos de carrozas, excepto dos.

Mientras tanto, la fiesta continuó en las distintas calles y plazas de la villa, abarrotadas de gente en busca de sombras que permitieran sobrellevar el bochorno.

En la Musika Plaza Larrain Dantza taldea y los dulzaineros pusieron el ritmo, mientras que por la tarde la fiesta se concentró en Iñurritza, con la romería del grupo Bide Batez y juegos mitolótigos. La banda Oxabi se encargó de hacer bailar al público congregado durante la noche en la plaza Munoa, mientras que en el malecón y en las txosnas también se disfrutó de la música.

100 años de euskal jaia

El año que viene se celebrará la edición número 100 del Euskal Jai Eguna en Zarautz. Se trata de una edición que contará con un programa “especial”, avanzó el alcalde, Xabier Txurruka. Sin embargo, antes de ponerse manos a la obra, tocará hacer una valoración de la presente edición.