Con algunos minutos de retraso, pero con paso firme y decidido, la compañía Jaizkibel ha iniciado este viernes por primera vez su desfile matutino desde Gernikako Arbola, junto a la muralla, el mismo lugar desde el que parte el Alarde. Fue uno de los hitos de la jornada, pero no el único. Con Nora Ferreira estrenándose en el puesto de capitana, la compañía enfiló hacia la calle Mayor, donde este año tampoco se desplegaron plásticos negros, aunque todavía hubo espectadores que dieron la espalda a la tropa.
En un ambiente sumamente alegre y en su camino hacia Arma Plaza, la compañía pasó ante los arkupes del Ayuntamiento, donde se encontraban algunos portavoces políticos, como Maddalen Iriarte y Mertxe Aizpurua (EH Bildu), o Miren Gorrotxategi y Miren Echeveste (Elkarrekin Podemos). Unos metros más arriba, en el pórtico de la iglesia de Nuestra Señora de la Asunción y del Manzano, aguardaban el alcalde, Igor Enparan (Abotsanitz), junto a los ediles de su grupo y los de EH Bildu, así como la diputada general, Eider Mendoza, el presidente de las Juntas, Xabier Ezeizabarrena (PNV), el viceconsejero de Derechos Humanos, Memoria y Cooperación, José Antonio Rodríguez Ranz, el Ararteko, Manu Lezertua, y la directora de Emakunde, Miren Elgarresta.
Dejando atrás Arma Plaza, Jaizkibel volvió a recorrer la calle Mayor para dirigirse hacia Saindua, donde finalizaría el desfile de la mañana. Durante todo el recorrido la compañía estuvo arropada por muchos simpatizantes, que se encontraban tanto en las aceras como detrás de la tropa. De hecho, antes de romper filas los integrantes de la compañía formaron un pasillo que atravesaron quienes iban tras ella, aplaudiéndose los unos a los otros.
Ya en Saindua, la capitana, Nora Ferreira, declaró sentirse muy contenta. “La mañana ha sido muy bonita, cada vez somos más en la compañía y también hay cada vez más gente en las aceras”. Ferreira aseguró asimismo que “personas de otras compañías también nos han aplaudido y eso nos parece muy positivo”.
La capitana valoró también el hecho de haber podido salir desde Gernikako Arbola, así como su presencia junto a la Corporación en la misa de Guadalupe.
Por su parte, la cantinera Helene Gebara aseguró haberse sentido “muy bien” durante el recorrido de la mañana. “Había mucha gente aplaudiendo, aunque como siempre también había gente que no estaba aplaudiendo. Todavía queda mucho por hacer”. No obstante, se mostró “contenta con el trabajo que ha hecho Jaizkibel y con los pasos adelante que se han dado este año”.
Las integrantes de la compañía igualitaria se dirigieron después a Guadalupe para renovar el voto y por primera vez contaron en el Santuario con un espacio reservado para sus representantes ras la Corporación Municipal.
Por la tarde, las filas de Jaizkibel aumentaron, pues la participación resultó mayor que durante la mañana. La compañía efectuó su recorrido, desde Saindua hasta Arma Plaza, pasando por la Marina. Después, en la plaza Gipuzkoa, que se encontraba repleta de gente, realizó su propio Zapatero, en un ambiente de alegría tras una jornada intensa y bonita, tal como declararon muchas de sus componentes.
No obstante, desde Jaizkibel aseguran que todavía queda un largo camino por recorrer en su lucha por lograr un “Alarde público, único e igualitario”, pero tienen claro que seguirán peleando por ello.
