Los vecinos de Legazpi se muestran preocupados por los robos y las peleas de las últimas semanas y el Ayuntamiento no es ajeno a esta preocupación. La alcaldesa, Koldobike Olabide, el teniente de alcalde, Eric Gálvez, y el jefe de la policía municipal, Xabier López, han mantenido una reunión con mandos de la ertzain-etxea de Bergara para mostrar su preocupación y acordar un plan de acción ante la concatenación de actos delictivos ocurridos en establecimientos del municipio en las últimas semanas.

Pueblo tranquilo

Desde el Ayuntamiento de Legazpi reconocen que los sucesos de las últimas semanas han generado “un ambiente de preocupación en un pueblo que no está acostumbrado a este tipo de acciones dada su tranquilidad y seguridad habitual”.

En la mencionada reunión, los responsables municipales, además de trasladar su preocupación, han acordado con la Ertzaintza un plan de acción preventivo que se pondrá en marcha con carácter inmediato.

Entre las medidas acordadas por los representantes municipales y los mandos de la Ertzaintza está la instalación de cámaras de seguridad en puntos estratégicos del municipio. Estas cámaras tendrán un doble propósito: ahuyentar a los delincuentes y, en el caso de que se produzca un delito, ayudar a identificarlos para su posterior detención. Asimismo, quieren recordar la importancia de llamar a la Ertzaintza al 112 ante cualquier sospecha o indicio de que se esté cometiendo un delito.

Olabide, Gálvez y López consideran que Legazpi es un pueblo tranquilo y seguro. “Queremos que lo siga siendo y por eso nuestra tolerancia ante este tipo de acciones delictivas será cero”.

Para concluir, dan a conocer que se ha convocado una junta de portavoces para informar al resto de partidos sobre la reunión mantenida con los mandos policiales.