Con la presa hinchable ya reparada y finalizado el periodo de reproducción del chorlitejo chico que se había asentado en el Oria, la instalación neumática está a la espera de que el río aumente su caudal para que pueda ponerse en marcha próximamente.

De esta forma, el Ayuntamiento de Tolosa está preparado para hacer funcionar la presa una vez que las precipitaciones aumenten el caudal mínimo del río, para lo cual no hay una fecha exacta y dependerá de la climatología.

Las parejas de chorlitejo chico que habían ocupado las laderas del río Oria provocaron en verano el aplazamiento de la puesta en marcha de la presa. Se trata de un ave protegida, que se instaló en Tolosa y comenzó a reproducirse en la graveras que se han formado a causa del bajo nivel del agua.

Se trata de una especie catalogada como “vulnerable” en el Catálogo Vasco de Especies Amenazadas y en régimen de protección especial en el Listado de Especies Silvestres en Régimen de Protección Especial. La puesta en marcha de la presa hubiese supuesto, de facto, la pérdida de huevos y crías que habitan en las graveras y está prohibido deteriorar y destruir los lugares de reproducción de aves protegidas. Sin embargo, finalizado el periodo de cría, las aves ya no están en Tolosa, lo que deja vía libre al Ayuntamiento para hacer funcionar la presa.

Las inundaciones y fuertes lluvias del pasado mes de diciembre provocaron una avería en el sistema electrónico de la presa hinchable. Desde entonces, la presa no ha estado operativa y el caudal de agua ha disminuido considerablemente.

El Ayuntamiento de Tolosa ha mantenido varias reuniones con la Confederación Hidrográfica y la Agencia Vasca del Agua URA, tras las cuales se ha llevado a cabo el proceso de contratación de los trabajos de reparación a la empresa alemana Flecksmühle (Spare SA en España), encargada en su día de la construcción de la presa. El sistema electrónico de la presa ya está reparado y la empresa ha realizado varias pruebas.