La calle Zubieta de Bergara ya luce parte de su nuevo look. La actuación urbanística que arrancó el pasado enero encara su segunda fase cumpliendo el calendario de trabajo establecido. “Hasta el momento no han surgido contratiempos y las obras se están ejecutando según lo previsto”, explican desde el Gobierno municipal.
Los operarios de la empresa Construcciones Zubieder se encargan de acometer la intervención que tiene como escenario la calle Zubieta y la contigua Masterreka; una de las arterias principales del municipio que afronta su transformación urbanística en clave de accesibilidad, ganando espacio para las aceras y reorganizando los aparcamiento, además de renovar las infraestructuras, el mobiliario urbano y el alumbrado público. En lo que a desembolso económico –más de dos millones de euros– se refiere se trata de una de las mayores inversiones de los últimos años, que el Ayuntamiento va a financiar en tres ejercicios económicos (2021, 2022 y 2023).
más de cinco meses conviviendo con las obras
Más de cinco meses han pasado desde que diera el pistoletazo de salida la reordenación de ambas calles. Con la primera fase ya concluida, las máquinas ocupan ahora el tramo que se extiende entre el bloque de viviendas número 36 (junto al paso de cebra del puente) y el alto de Mugerza. “La carretera seguirá cortada al tráfico rodado como hasta ahora. No obstante, desde el día 1 de este mes los residentes tienen permitida la entrada al tramo asfaltado (de los números 6 al 22) para tareas de carga y descarga puntuales, y acceder a los locales con uso de garaje”, cuentan los responsables municipales, que también insisten en que de momento “no se puede aparcar en la zona”.
Dieciocho meses de obras se necesitarán para rehabilitar las dos calles. Masterreka, hasta la altura del palacio Eguino-Mallea, será la última en pasar por el quirófano de las reformas. En este caso, los acabados de la renovada vía y la mejora de las infraestructuras darán continuidad a la intervención que se están materializando en Zubieta.
La ampliación de aceras, la reducción de la velocidad al volante y la supresión de barreras arquitectónicas conforman, por tanto, el grueso de esta reurbanización; una vieja reivindicación que estará finalizada, si todo marcha como hasta la fecha, para verano de 2023.
