Zarautz, el destino perfecto de verano
algo especial tendrá zarautz... y es que la localidad costera recibe año tras año un gran número de familias dispuestas a pasar una corta o larga temporada de verano
Algunos llegaron por casualidad o porque les gusta la costa y a otros les une algún vínculo familiar. Pero lo cierto es que muchos de los que visitan Zarautz por primera vez quedan prendados del buen ambiente que se respira. ¿Qué tiene Zarautz para atraer a tanta gente en la época estival? Probablemente los motivos sean muchos pero seguro que la playa algo tendrá que ver... Sea como sea, son muchas las familias que veranean año tras año. NOTICIAS DE GIPUZKOA se ha reunido con algunas de ellas para saber cómo es su verano en el municipio guipuzcoano.
Pedro Arizti y Jennifer Barsky llevan cuatro años viniendo a Zarautz cada verano con sus tres hijos. Son una familia totalmente atípica y del mundo. Pedro es de Bilbao y Jennifer de Montreal (Canadá), pero se conocieron en Nueva York y sus tres hijos, Tomás, Amelia y Cecilia, nacieron y crecieron en Estados Unidos. Pero la historia no acaba ahí. Actualmente, están viviendo en Colombia y probablemente tengan que trasladarse a otro lugar dentro de un año. Sin embargo, tienen claro que Zarauz es su destino de verano. “Yo conozco Zarautz desde hace tiempo porque tengo amigos, pero terminamos aquí los cinco juntos hace cuatro años. Íbamos hacía Bilbao volviendo de Francia y un amigo me dijo que nos quedáramos a pasar la noche. Y fue un amor a primera vista. A los chicos les encantó la playa y el ambiente. Entonces nos quedamos dos o tres días, al año siguiente estuvimos un poco más y los dos últimos años nos hemos quedado unas dos o tres semanas, vamos cada vez a más”, cuenta Pedro.
A Amelia, Cecilia y Tomás les encanta el surf y aseguran que son “muy felices” en Zarautz. “Me encanta venir aquí porque para mí es como una aventura”, afirma Tomás. Durante sus estancias en Zarautz aprovechan para disfrutar de la playa y del agua y, por supuesto, también de los pintxos. “También nos gusta ir al monte en familia y solemos hacer excursiones a sitios cercanos”, añaden. La conexión de esta familia con Zarautz va “más allá del surf y de la playa”, y es tanta su pasión por este lugar que su idea es poder establecerse en el municipio, “al menos, los veranos”. “Zarautz tiene mucho turismo pero sigue siendo auténtico. Se ha internacionalizado pero mantiene su esencia y eso no es tan fácil de conseguir cuando llega tanta gente de fuera”, comentan Pedro y Jennifer.
Para los navarros Javier Merino y Marijose Garín Zarautz siempre ha sido un punto de referencia. Hicieron su primer viaje juntos al camping de Zarautz cuando tenían 18 años. En los años posteriores venían de manera esporádica, hasta que en 2009 se compraron una casa en Vista Alegre. Desde entonces, es donde suelen pasar los veranos junto con su hija Leire. Marijose fue la culpable: “Estudié en Donostia y la costa siempre me ha tirado mucho. Siempre estaba mirando pisos pero los precios eran imposibles, hasta que nos encontramos con este”, recuerda. Así, esta familia de Zizur Mayor se compró un piso, donde suelen pasar julio y agosto y también algunos fines de semana el resto del año, dada la cercanía con su localidad de origen. “Nos enamoramos de las vistas del piso. La verdad es que estamos encantados, es una gozada”, aseguran. Además, tanto los padres como la hija tienen cuadrilla en Zarautz y suelen hacer una vida de lo más normal: ir a la playa, pasear, potear, leer, ir de compras... “Podríamos decir que es nuestra segunda casa. Ya estamos tan integrados que somos como muy de Zarautz”, afirman entre risas.
Jesús Landa, por su parte, nació en Zarautz, pero ha vivido en diversos lugares del Estado porque su padre, también Jesús, era futbolista profesional y Zarautz siempre ha sido un lugar de veraneo para él. Actualmente, vive en Madrid con su hijo Mikel de once años y viajan a Zarautz todos los veranos para visitar a los aitonas, Jesús y Margarita. “Nuestro verano aquí es muy tranquilo y precisamente ése es uno de los atractivos, que es un lugar tranquilo comparado con otros sitios de veraneo. Además, siendo tan pequeño, puedes hacer todo tipo de actividades, desde actividades acuáticas o de montaña, hasta jugar al golf o montar a caballo. Es increíble que un sitio te ofrezca tantas posibilidades”, comenta Jesús.
El pequeño Mikel practica surf, pero en general, suelen llevar una vida muy tranquila. “Aprovechamos para descansar e ir a la playa. Nos gusta hacer una vida familiar”, afirma Jesús. La familia estuvo en Zarautz durante un mes en julio y ahora está en Madrid por cuestiones profesionales: “Pero esperamos volver a finales de mes a pasar algunos días más”.