El bar Trueba de Gros reabre sus puertas con nueva cara

Donostia - El bar Trueba del donostiarra barrio de Gros reabrió ayer sus puertas, en un acto que comenzó a las 20.00 horas en la calle Miracruz número 11. En la inauguración se dieron cita amigos de las propietarias, Carmen Ostivar y Nekane Fernández, gente conocida de Donostia y vecinos del barrio que tuvieron gran curiosidad por ver y disfrutar de este nuevo establecimiento. “Estamos en una zona muy buena, y también queremos abrirlo para la gente del comercio y los que trabajan en las oficinas de alrededor”, comenta Nekane Fernández.

Para beber ofrecieron un excelente vino (blanco, tinto y rosado), cerveza y cava. Además, también se degustaron los fabulosos canapés caseros, pintxos muy elaborados, tostas troceadas y cremas curiosas presentadas en vaso de chupito. Muchos de los pintxos fueron elegidos a conciencia de la propia carta, ya terminada para que los clientes tengan una idea de la línea gastronómica del bar.

Todos quedaron gratamente sorprendidos por la nueva imagen del establecimiento. “Hemos querido cambiar la imagen del antiguo bar Trueba. Aunque el nombre siga siendo el mismo, queríamos darle un aire completamente distinto, y creo que lo hemos conseguido”, comenta Carmen Ostivar.

Lo que este nuevo Trueba ofrecerá al cliente es una gran variedad de productos de calidad. Principalmente se van a centrar en el mundo de los desayunos. Al cambiar su horario de apertura (7.00 horas), los clientes tendrán la opcion de disfrutar de una amplia carta de desayunos un tanto diferentes como, por ejemplo, muchos de ellos acompañados con leche con cereales, yogur con frutas o varios tipos de zumos naturales. Nekane Fernández explica que se van a centrar “mucho en los desayunos porque estamos en una zona muy privilegiada, rodeados de oficinas, hoteles, pensiones y, sobre todo, por la salida del tren”.

Al margen de los desayunos, también ofrecerán comidas y cenas, aunque las cenas de momento solo las darán los fines de semana.

Para los mediodías habrá mucha variedad (platos, bocadillos, hamburguesas...). Por otra parte, han optado por ofrecer un plato del día acompañado de un postre por 7 euros. Aunque no sea de lo más común, creen que es mejor un plato importante que el menú de tres platos de toda la vida. “La gente que trabaja no tiene demasiado tiempo para comer. Lo hemos tenido en cuenta para elaborar nuestra carta”, afirma Carmen.

Con todo esto y su amplio comedor para unas 60 personas, el bar Trueba ya está en marcha para satisfacer a los nuevos clientes. - Laura Carboneres