La Diputación Foral de Gipuzkoa ha desestimado las alegaciones presentadas por Eguzki, Anerreka Ingurumen Elkartea y Naturkon (coordinadora de los grupos ecologistas y naturalistas de Gipuzkoa) y ha decidido declarar "de interés público" el Plan Especial que posibilitará construir un canal de aguas bravas en el cauce del río Oria, concretamente, en la antigua central hidroeléctrica de Orbeldi, en Usurbil.

Según han explicado estas asociaciones ecologistas, esto significa que se mantendrá la actual presa, "cuya demolición es una de las claves de la regeneración del Oria, por ser el primer obstáculo de envergadura con el que se encuentra la fauna piscícola (salmones, anguilas) que remonta el cauce desde la desembocadura".

De hecho, tal y como han apuntado, entre las actuaciones que la Diputación incluye en el Plan Director de Permeabilización de Obstáculos de Gipuzkoa (2020), se señala que "cabe destacar la demolición del azud de Orbeldi, primer obstáculo desde la desembocadura". "Paradójicamente, la Diputación declara 'de interés público' unas instalaciones que se basan en que se mantenga la presa, lo que, por cierto, deja muy tocada la credibilidad del citado Plan Director de Permeabilización de Obstáculos", han criticado.

En esa misma línea, han incidido también que en el Plan de Acción del Paisaje del Río Oria en el Municipio de Usurbil (2016) se apunta que "la propuesta de actuación consiste en la recuperación ambiental y paisajística del entorno de la presa de Orbeldi".

"Se plantea una restauración paisajística mediante la eliminación de la edificación abandonada, y el desmantelamiento de la presa que, en la actualidad, resulta un obstáculo para la ictiofauna, así como para el flujo natural del agua del Oria", lo que, según han denunciado los ecologistas, "no ha impedido que el Ayuntamiento de Usurbil haya otorgado la aprobación inicial al Plan Especial del canal de aguas bravas".

"El canal de aguas bravas de Orbeldi no es la central nuclear de Lemoiz, ni la incineradora, ni tampoco el Guggenheim de Urdaibai, pero está claro que la biodiversidad se sacrifica en aras de cualquier otro interés, absolutamente de cualquiera. Y, si alguien no lo remedia, eso es lo que va a pasar, también en Usurbil", han concluido.