Los y las trabajadoras del servicio de transporte Avanza de Gipuzkoa están secundado el primero de los tres días de huelga convocados para hoy, mañana y el lunes, como ha recordado el sindicato ELA.

En la concentración que ha tenido lugar frente al palacio foral, trabajadores de Avanza han señalado que en el primer día de huelga la respuesta de la plantilla está siendo amplia, aunque todavía no disponían datos concretos.

En la concentración los trabajadores y trabajadoras de Avanza han denunciado las graves deficiencias existentes en materia de mantenimiento de los autobuses, han denunciado “el despido improcedente de un compañero”, cuya readmisión demanda, y han reclamado que se levante la sanción a otro compañero que “se negó en Zarautz a abrir el maletero izquierdo, cuando la empresa había precintado el derecho, por el problema de atropello que podía haber”. La sanción fue de tres días sin empleo y sueldo.

Así las cosas, desde el comité de empresa se ha exigido la adopción de medidas con carácter de urgencia para acabar con la inseguridad que sufren “conductores y viajeros” por el estado de la flota de autobuses. 

José Manuel López, miembro del comité, recordó que la huelga “no es para pedir aumento de sueldo o días de descanso, la hacemos para reclamar más seguridad para nosotros y los usuarios”.

“No sabemos lo que podremos conseguir. Depende de la Diputación poner los medios para garantizar un transporte digno”, ha dicho.

“Hoy había 25 ertzainas en un piquete informativo, pero no los mandan para que nos paren en controles de carretera, en la autopista, sabiendo los problemas que tenemos de frenos, discos partidos, aire acondicionado que no funciona, con temperaturas de 30 grados en el interior y otras averías graves”, ha denunciado.

Empeoramiento de la situación

“Ha llegado el momento de decir basta”, ha constatado.

Fermín Iregi, por su parte, ha subrayado que en “los últimos cuatro años el mantenimiento de los autobuses ha ido a peor y ha llegado el momento en el que todo son averías, algunas muy graves”.

“El mantenimiento le corresponde a la empresa, pero es responsabilidad de la Diputación asegurar que se realiza”, ha añadido, recordando que no son pocos los episodios en los que los viajeros de un autobús averiado han tenido que esperar a que llegara otro de sustitución “incluso en el arcén de la autopista “. “Han tenido que esperar hasta una hora y después realizar un transbordo con el riesgo que conlleva”, ha criticado.

Los servicios mínimos decretados por Diputación para las jornadas de huelga son del 30% y, según ha apuntado Iregi, pese no disponer de datos contrastados, a media mañana los servicios ofrecidos rondaban el 40%.

“Estamos contentos del seguimiento, la gente está animada. La pena en que no esté todo el comité”, ha añadido.

“En diez años la primera vez que he visto a un responsable foral fue el pasado miércoles, bienvenido sea. Espero que se haga un seguimiento”, ha señalado el miembro del comité, que ha informado que en las últimas jornadas la empresa ha estado realizando numerosos arreglos aunque no de demasiado calibre. “El verdadero mantenimiento, el de motores o frenos, no se hace. Lo que están haciendo es algo superficial, por guardar las apariencias”, ha asegurado.

La Diputación ha informado que desde 2022 se han abierto a la empresa un total de 22 expedientes e interpuesto multas por un importe aproximado de 20.000 euros. 

Pero, según declaró López, “han dejado el globo hincharse tanto que la situación es la que es”.

Para ilustrar esta denuncia ha narrado un episodio sufrido en primera persona la víspera. “Realizando un servicio Eskoriatza–Salinas, con un autobús de 24 plazas, iba sin calefacción trasera para los usuarios, con los chivatos de pastillas gastados y con las luces que veía poquito. Tenemos que andar así diariamente”, ha denunciado.

“Comunicas, apuntan y seguimos igual. Hay que ponerle remedio.”, ha apostillado López.

Avanza tiene la concesión de los servicios que oferta hasta 2025 y cuenta en la plantilla con cerca de 260 trabajadores y trabajadoras.

Los tres días de huelga llegan tras meses de denuncias sobre la situación "insostenible" de los autobuses de este operador de transporte y el incidente que este mismo mes de mayo, concretamente el pasado día 3, sufrió uno de los autobuses urbanos de Arrasate, servicio que hasta entonces también era operado por Avanza. El vehículo cogió fuego y los usuarios tuvieron que escapar de las llamas por la puerta de emergencia.

Esto llevó al Ayuntamiento que lidera Maria Ubarretxena a tomar cartas en el asunto y a rescindir el contrato con la empresa, que ya acumulaba ocho expedientes en el municipio por "falta de mantenimiento de vehículos, demora en su sustitución...".

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