La galerna ha entrado a media tarde por la costa de Gipuzkoa, lo que ha traído consigo el ansiado descenso de las temperaturas después de una jornada abrasadora en todo el territorio, con temperaturas que han rozado los 43 grados en algún punto del interior y que han superado los 40 en la costa, valores muy altos e inusuales por mucho que nos encontremos en pleno verano.

El citado viento del norte, además de vaciar las playas -como se puede apreciar en el vídeo de la playa de Hondarribia-, ha hecho que estos registros hayan bajado de los 30 grados en la costa, aliviando el ambiente. Eso sí, en el interior el descenso de la temperatura se ha resistido.

Galerna en la playa de Hondarribia

Galerna en la playa de Hondarribia Ana Belén del Álamo

La ola de calor que se ha vivido desde mediados de la semana pasada en Gipuzkoa ha vivido hoy su jornada más bochornosa, sobre todo en la costa, donde ni siquiera la brisa ha aliviado la sensación de calor, algo que sí había sucedido en los días previos. La Agencia Vasca de Meteorología, Euskalmet, avisaba por la mañana de que íbamos a vivir un día de “calor asfixiante”, y así ha sido.

42,9 GRADOS EN ARRASATE

Trece de las estaciones que tiene Euskalmet por el territorio para medir las temperaturas han superado los 40 grados, y muchas otras se han quedado muy cerca de esta cifra. El tope lo ha marcado Arrasate, con una máxima de 42,9 grados registrados a las 13.30 horas. Rondando los 42 han estado en San Prudentzio (42,4), Ibai Eder (41,6), Altzola (41,6) y Lasarte (41,5), mientras que en Miramon se han alcanzado los 40,9 grados. Todo ello, además, tras una noche bastante calurosa, en la que en algunas localidades la mínima apenas ha bajado de los 20 grados.

En comparación con la primera ola de calor, la vivida en junio en Gipuzkoa, las temperaturas han sido muy parecidas. Si el pasado mes la temperatura máxima alcanzada en las estaciones de Euskalmet la marcó Ibai Eder, con 42,3, hoy Arrasate ha superado en medio grado este registro. Sin embargo, en junio la estación de la Agencia Española de Meteorología (Aemet) en el aeropuerto de Hondarribia alcanzó los 43,3 grados, y hoy en ese punto el tope se ha quedado en 40,8.

“Son temperaturas a las que no estamos acostumbrados. Lo que trae es la problemática de incendios forestales y que los agricultores también estén sufriendo porque no han podido cosechar. La verdad es que estos calores traen muy pocos beneficios”, ha señalado esta mañana en Onda Vasca el responsable de Euskalmet, José Antonio Aranda, que anunciaba que la galerna “con viento del noroeste, refrescará el ambiente” y que “irá acabando con la ola de calor a medida que vaya pasando por las diferentes zonas”.

“NORMALIDAD” DESDE MAÑANA

La previsión para mañana martes es de ambiente soleado “con intervalos de nubes bajas a primeras horas en la vertiente cantábrica”. Estas nubes se irán disipando en las horas centrales, pero por la tarde la nubosidad volverá a aumentar y no se descarta incluso que llueva “al final de la jornada”. Las temperaturas seguirán siendo altas, aunque más soportables que las de estos días previos. Se esperan máximas de 25 grados en la costa y de 30 en el interior. Eso sí, en Araba aún no ha pasado este largo episodio de calor y en algunos puntos seguirán estando cerca de los 40 grados.

“Por ahora lo que se ve es una cierta normalidad para esta semana”, señala Aranda, que no se atreve a pronosticar si a lo largo de este mismo verano puede llegar una tercera ola de calor al territorio y a Euskadi en general: “Lo que pase la semana que viene o las siguientes, pues quién sabe”.