Las obras de construcción del enlace de Marrutxipi, que conectará el tráfico de la Variante con los barrios de Intxaurrondo, Gros y Egia sin pasar por el paseo de Bizkaia, han dado estos días sus primeros pasos, por lo que la obra será realidad en mayo de 2024, según el plazo de trabajos previsto.

Colectivos ecologistas como Eguzki y Haritzalde dieron a conocer este miércoles que unos 170 árboles, que forman parte de los espacios verdes que unen la zona del ambulatorio de Intxaurrondo con las inmediaciones de las Cocheras, en el parque Etzieta, han sido numerados con pintura, lo que indica una inminente tala previa a la ejecución de las obras.

Ambas agrupaciones criticaron que se vaya a eliminar la zona verde con el fin de crear en su lugar una nueva carretera de conexión de la variante con la zona urbana.

El enlace de Marrutxipi es una obra que ejecutará la Diputación de Gipuzkoa, con un coste previsto de 12,6 millones de euros. El Ayuntamiento de Donostia, por su parte, aportará 3,5 millones de euros para financiar esta infraestructura viaria, que fue aprobada con el objetivo de descargar de circulación los viales paralelos al río a su paso por el Centro y reducir atascos.

El proyecto en el que se basa el nuevo enlace prevé la construcción de dos pasos por debajo de la actual variante, uno en cada sentido, como parte del enlace. También habrá dos nuevos ramales y una rotonda en la unión de la calle Fernando Sasiain, junto a Cocheras, con el paseo de Mons.

La portavoz foral, Eider Mendoza, calificó el futuro enlace viario como una actuación “estratégica” cuando se aprobó el acuerdo de financiación entre el ente foral y el Ayuntamiento de Donostia.

Por otra parte, está muy avanzado el nuevo vial de conexión con el Polígono 27 de Martutene. En este caso, el enlace une la carretera GI-2132, a su paso por Astigarraga, con la zona de pabellones. La carretera tendrá casi un kilómetro de longitud, y comenzó en mayo del pasado año, con un presupuesto de más de 6,7 millones de euros.