Los servicios de emergencia han concluido este miércoles las labores de búsqueda del migrante senegalés de 24 años, Ibrahim Diallo, que desapareció el pasado sábado en el río Bidasoarío Bidasoa cuando trataba de alcanzar la orilla francesa. Pese a no conseguir hasta el momento el principal propósito, la investigación permanecerá abierta y en el caso de que haya nuevos indicios, se reanudará el rastreo.

Miembros de la Cruz Roja en Gipuzkoa, la Ertzaintza, la Guardia Civil y servicios de emergencia franceses han participado desde el sábado en este operativo. Estos días se ha analizado la zona desde la que se lanzaron los migrantes con el objetivo de alcanzar la ribera francesa y la desembocadura de un río Bidasoa que ha bajado con mucha fuerza, lo que dificulta el hallazgo.

Este miércoles se habían vuelto a reanudar las labores de rastreo en la zona de Puntxas, una zona ya de por sí traicionera por sus complicadas corrientes. Más aún, los conocedores del paraje explican que el río guarda bajo la superficie pozos que desde fuera ni se intuyen.

En las primeras horas de la búsqueda, el domingo se llegaron a hallar efectos personales del migrante desaparecido como ropa y su teléfono móvil. El director de Migración y Asilo del Gobierno Vasco, Xabier Legarreta, había reconocido este miércoles en Onda Vasca que por culpa de las fuertes corrientes de estos días sería "muy difícil" encontrar a Diallo.

En caso de confirmarse el fatal desenlace, sería la octava persona que muere en el intento de llegar a suelo francés por cualquier medio, incluido tratar de cruzar a nado un río peligroso ante la presión policial francesa que ha denunciado el propio Legarreta: "El control policial en la muga incumple el Procolo Schengen porque hay devoluciones en caliente a plena luz del día. (...) Nos desayunamos día sí y día también con material gráfico y audiovisual sobre esto. Son controles racistas y selectivos".