Gipuzkoa registró la semana pasada 25.396 positivos de coronavirus, casi 1.000 menos que la semana anterior, y podría estar ante el anunciado cambio de tendencia. Por de pronto, y aunque la incidencia acumulada a 14 días por 100.000 habitantes sigue por encima de los 7.100 casos, la incidencia a 7 días ya acumula varias jornadas de descenso, lo que junto a otros indicadores hacen pensar que el territorio histórico ya habría alcanzado el pico de esta sexta ola.

Si la semana del 27 de diciembre al 2 de enero Gipuzkoa diagnosticó 26.483 positivos, los siete días posteriores dejan 25.396 casos, una caída que habrá que tomar con cautela. Como siempre en esta pandemia, los próximos días y semanas confirmarán si este cambio de tendencia es puntual o sólido, pero hay argumentos para pensar que estamos ante una fase de estabilización, al menos en Gipuzkoa.

  • 11-17 de octubre: 286.
  • 18-24 de octubre: 385.
  • 25-31 de octubre: 454.
  • 1-7 de noviembre: 802.
  • 8-14 de noviembre: 1.421.
  • 15-21 de noviembre: 2.256.
  • 22-28 de noviembre: 3.560.
  • 29 de noviembre-5 de diciembre: 4.921.
  • 6-12 de diciembre: 5.370.
  • 13-19 de diciembre: 5.946.
  • 20-26 de diciembre: 10.663.
  • 27 de diciembre-2 de enero: 26.483.
  • 3-9 de enero: 25.396.

En la jornada en la que la gran mayoría de centros escolares de Gipuzkoa recupera su actividad posvacacional, los datos del pasado jueves a este domingo ya terminan de recoger el impacto de la Nochevieja y empiezan a registrar los efectos de la víspera y el Día de los Reyes Mayos, última festividad navideña, por lo que el final de este periodo podría contribuir a apuntalar el descenso de casos, que se encuentran en niveles muy altos.

Por municipios, Donostia ha registrado la quinta parte de los positivos de todo Gipuzkoa (5.565), seguido de Irun (2.519); y Errenteria (1.333). Eibar (1.302), Tolosa (851), Arrasate (827), Hernani (719), Zarautz (669), Bergara (668) y Hondarribia (651) copan las diez primeras posiciones en cuanto a casos identificados. Zerain (4), Arama, Gaintza (3), y Beizama (2) son los municipios con menos casos en los últimos siete días. Una semana más, todos los municipios registran algún caso de coronavirus.

La incidencia acumulada a 14 días continúa su crecimiento en Gipuzkoa por cotas nunca alcanzadas y ya supera los 7.000 casos por 100.000 habitantes. Dicho de otra manera, el 7%. No obstante, y pese a rozar los 7.200 positivos, la cifra ya crece a un ritmo que nada tiene que ver con hace apenas 10 días, cuando encadenó cuatro días con crecimientos superiores al 11% diario (2.780, 3.298, 3.724 y 4.264 casos entre el 28 y el 31 de diciembre). Los saltos ahora son menores y desde el 5 de enero la tasa crece por debajo del 5%, con un 2,49% de este último sábado al domingo. La proyección invita a pensar que la incidencia acumulada podría estabilizarse y después empezar a bajar esta misma semana.

Indicadores para el optimismo

La que ya ha cambiado su tendencia es la incidencia a 7 días. En Gipuzkoa alcanzó el techo la víspera de Reyes, con 4616,92 casos por 100.000 habitantes, y ya acumula desde entonces cuatro días de caída y este domingo se situaba en 4.059,08. El 20 de diciembre fue el último día que se encontraba por debajo de 1.000.

Otro indicador que en Gipuzkoa apuntala la tesis del cambio de tendencia es el número reproductivo básico. Es uno de los primeros que explican el estado de una pandemia, si está en expansión o en remisión. Que se mantenga por debajo de 1 es buena señal, y por el momento, ya lleva dos días por debajo de esa cifra. Desde el comienzo de esta ola, a mediados de octubre, no había encadenado dos días por debajo de 1.

Lejos por lo tanto del pico que ha marcado en esta sexta ola, cuando el 30 de diciembre se situó en 1,7, lo que significa que cada persona contagiada tiene capacidad de transmitir el virus a 1,7 personas más. Hay que remontarse al 20 de diciembre para ver la tasa por debajo de 1, y fue solo una jornada.

Cautela general: los hospitales

Los indicadores positivos empiezan a asomar y los próximos días podrían alumbrar nuevas razones para la esperanza, aunque quedan hay razones para la prudencia, porque para que ese cambio de tendencia y el consiguiente alivio empiece a percibirse en los hospitales hará falta que transcurran cerca de diez días.

La sociedad afronta unas semanas en las que espera que toda la subida de casos tenga un impacto limitado en los hospitales y las UCI, como explica el responsable de esta unidad en el Hospital Donostia, Felix Zubia. "Para nosotros diciembre ya fue duro y el próximo mes también lo será. Mi preocupación es cuánto más duro será. Ya dijimos que para cuando se aclare la situación será tarde para tomar medidas".

A día de hoy, y en datos consolidades del conjunto de la CAV, 796 personas están ingresadas en planta y 142 en UCI. Supone un porcentaje mayor de enfermos en planta respecto a las UCI si lo comparamos con otras olas, ya que los propios responsables médicos aseguran que la mayoría de pacientes presentan cuadros más leves que en anteriores olas.

Con una tasa de vacunación superior al 90%, la ciencia ha dejado probado que la vacuna protege de los cuadros más graves del coronavirus. Sin embargo, la clave reside en si, pese a haber un porcentaje menor de cuadros complicados, estos se multiplican como el total de casos. Si ocurre algo similar, el número de personas que requerirán de atención hospitalaria también se multiplicará. Una incógnita, quizá la última gran pregunta de esta sexta ola, que necesitará de varias semanas para tener respuesta.