Sin duda, el XXIV Día del Pastor que se celebró ayer en Ordizia fue un escaparate para el pastoreo y cómo no, para el queso, ya que se cortó la primera pieza de la nueva campaña del queso Idiazabal. Un acto que no estuvo exento de novedades, ya que el cineasta y guionista ordiziarra José Mari Goenaga era el encargado de cortar ese primer queso de la temporada pero no pudo acudir porque se suspendió el vuelo en el que tenía que viajar desde Andalucía, donde se encuentra inmerso en su nuevo proyecto. En su lugar, su madre, Izaskun Balerdi, y su compañero de la película Handia Joseba Usabiaga fueron los encargados de realizar el corte de honor.

Como todos los años, una docena de actividades acompañaron la jornada. Desde por la mañana fueron muchos los visitantes que se acercaron hasta la plaza Garagartza donde estaba la exposición y venta de carneros de raza latxa que reunió en total a más de 200 cabezas de 50 pastores y a los diversos puestos que llenaron las calles.

sindicato renovado Seguidamente se inauguró la renovada cofradía agraria, más conocida como sindicato. En 2020 cumplirá 100 años y, después de una profunda renovación, acaba de abrir sus puertas en su local-tienda de la calle Euskalerria de Ordizia, con nuevos objetivos y la intención de seguir trabajando a favor del sector agrario. “Como Ayuntamiento de Ordizia llevamos muchos años trabajando con la cooperativa de agricultores”, destacó el alcalde de Ordizia, José Miguel Santamaría. Xabier Arruti, director general de Agricultura y Desarrollo Rural de la Diputación Foral de Gipuzkoa, también quiso recalcar la necesidad de impulsar el entorno rural: “La cooperativa se creó para los baserritarras y esperamos que así siga durante muchos años. Nosotros estaremos para ayudar en todo lo que podamos, apostando por el primer sector”. El encargado de cortar la cinta de la inauguración fue Joxe Antonio Múgica, que estuvo muy emocionado durante todo el acto. Con los ojos medio llorosos, recordó que su abuelo fue uno de los fundadores del sindicato y él también siempre ha estado “muy unido al primer sector”.

los imprescindibles Cómo no, el plato fuerte comenzó a eso de las 11.00, cuando cerca de 2.000 ovejas recorrieron el casco histórico del municipio mientras que todos los asistentes les hacían un pasillo. La estampa recordaba a las pasarelas de modelos, donde en este caso las protagonistas no eran otras que las ovejas y los pastores. Una imagen que rememora a aquellos pastores que realizaban la trashumancia, pasando por distintas localidades para tomar después el camino a la montaña.

Aunque el queso fuese el protagonista principal, tanto Arruti como Bittor Oroz, director foral de Desarrollo Rural, pusieron sobre la mesa la importancia de los ganaderos y agricultores. Así lo explicó Oroz: “No existe nación que no tenga un buen primer sector. Pero no tendremos un buen futuro si a esos ganaderos no les mejoramos las condiciones de trabajo” y también hizo un llamamiento a los consumidores: “Tenemos un producto de altísima calidad y muy estimado, pero hay que consumirlo. Si queremos tener un sector fuerte tenemos que hacer una apuesta por él, y al Gobierno Vasco siempre nos tendréis al lado”. Arruti, por su parte, destacó la necesidad del pastoreo para comprender la cultura vasca: “Si en Gipuzkoa hay una localidad unida al pastoreo y al primer sector esa es Ordizia. La cultura vasca no se puede entender sin el pastoreo, ya que además de producir un excelente queso el primer producto que crean es el paisaje, ese que se ve mirando hacia Aizkorri y Txindoki”, añadió.

desde sevilla Toda la sala estaba esperando a que llegase Goenaga para realizar el corte al queso nuevo, pero según pasaban los minutos el cineasta no aparecía y enseguida se descubrió el pastel. “Lamentablemente Goenaga no ha podido venir porque el vuelo que tenía que coger ayer por la noche desde Sevilla fue cancelado debido al temporal”. Esas fueron las palabras que utilizó el concejal Joxi Iturrioz para explicar la ausencia del guionista. Ausencia en modo figurativo, ya que de repente pusieron un vídeo donde aparecía del ordiziarra explicando cómo no había podido llegar, pero cortando el queso desde la distancia: “Pido perdón por no estar ahí y agradezco a todos los que pensaron en mí para cortar el queso”. Entonces cogió el queso que le habían dado en la presentación del Día del Pastor que tuvo lugar en Donostia hace poco más de dos semanas y lo cortó por la mitad. “El nuevo queso Idiazabal, la esencia de nuestros paisajes”, remató.

Pero, claro, el queso presente estaba en mitad del salón y ahí estaban los padres de Goenaga, Izaskun Balerdi e Iñaki Goenaga, y Joseba Usabiaga, compañero de trabajo. Algo sorprendidos y bastante avergonzados recibieron la noticia de que ellos serían los encargados de cortar el primer queso. “La verdad es que no me lo esperaba”, reconoció Usabiaga todavía con las mejillas sonrosadas. “Soy tolosarra pero me siento goierritarra y cómo no, me gusta mucho el queso, aunque prefiero que no sea muy fuerte”. Además, también hizo un guiño a la película Handia: “En los caterings que hacíamos durante el rodaje no faltaba nunca el queso”.

Los padres de Goenaga también se sintieron muy orgullosos y subrayaron que el acto fue muy emocionante aunque también se sentían apenados porque su hijo no pudo acudir: “Ayer por la noche nos llamó desesperado porque el vuelo había sido cancelado”. Aun así, ambos se mostraron felices y recalcaron que en su casa nunca ha faltado el queso y que fue la amoña Madalena la que lo introdujo en la despensa: “Desde siempre nos ha gustado el Idiazabal”, concluyeron sin perder la sonrisa.

homenajeados Una vez más, también se otorgaron los premios a la regularidad de la denominación de origen Idiazabal. Así, se llevaron los premios a la regularidad-calidad de 2017 la quesería navarra Dorrea, de Udabe, y el legazpiarra Aitor Mantxola, con su queso Makatza. Este último se mostraba más que contento por el premio: “Al final esperas hacerlo bien pero esto demuestra que vamos por el buen camino y me siento muy feliz por este reconocimiento. Me da fuerzas para continuar mirando para adelante y produciendo el mejor queso que podamos hacer”.

Como en ediciones anteriores, también hubo tiempo para homenajes. Primero se homenajeó al periodista y crítico gastronómico Cristino Álvarez, más conocido por su pseudónimo Caius Apicius, que falleció en Madrid el pasado 19 de enero a los 70 años. Considerado uno de los más importantes informadores gastronómicos del país, en 1991 recibió el Premio Nacional de Gastronomía y en 2014 ingresó en la Real Academia de Gastronomía con un discurso sobre el vino y el Camino de Santiago. Álvarez estuvo ligado al concurso de quesos de Ordizia durante muchos años y en el año 2005 recibió el homenaje en el Día del Pastor.

El segundo homenajeado y el que se llevó el mayor reconocimiento fue el cántabro Zacarias Puente. Entre sus muchos méritos, es el fundador de la Cofradía del Queso de Cantabria, y está muy unido al Idiazabal, a Ordizia y a Euskal Herria. Por ello, fue agradecido por todo el trabajo de difusión que hace a favor del queso Idiazabal allá adonde va. “Mi vida siempre ha estado ligada al queso y he sido muy afortunado por ello. Es un tesoro que tenemos y me emociona de placer estar aquí con vosotros”, resumió. A sus 83 años confesó que solo hay un producto que le guste tanto o más que el queso: “La leche me apasiona totalmente, porque al final, el queso es la eternización de la leche”.

Una jornada, en la que una vez más se puso en valor la necesidad de tener un primer sector fuerte y con buenas condiciones para los agricultores, con el fin de cuidar el paisaje que tenemos y para que todos podamos disfrutar del manjar que supone comer un buen trozo de queso Idiazabal.