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Uno de los hombres más altos del mundo quiere vivir en Urretxu

Saad Kaiche se hizo amigo del urretxuarra Pablo Gómez en el rodaje de la película ‘Aundiya’

Uno de los hombres más altos del mundo quiere vivir en Urretxu

urretxu - La presencia en el pueblo de un joven mucho más alto de lo normal está siendo uno de los principales temas de conversación estos días en Urretxu y Zumarraga. Se trata de Saad Kaiche. Es argelino y mide 2,30 metros. Calza un 58,5. Emigró a Lugo para jugar a baloncesto con el equipo de aquella ciudad y estos últimos años ha vivido en Barcelona. Ha conocido Euskadi a raíz de su participación en la película Aundiya. En este filme, ha dado vida al protagonista: el gigante de Altzo. Le ha encantado nuestro país y, además, se ha hecho muy amigo del urretxuarra Pablo Gómez. Tanto, que le llama “aita” y está alojado en su casa. Quiere encontrar un trabajo para quedarse definitivamente en Urretxu.

Gómez y Kaiche se conocieron en el rodaje de Aundiya. El equipo del filme grabó una escena en la iglesia de Itsaso y Gómez tiene un caserío detrás del templo. Les invitaron a participar como extras y así conoció al argelino. “En tres días de rodaje tienes mucho tiempo libre y entablamos conversación. Quedamos en que volvería de visita y es lo que ha hecho”, cuenta el urretxuarra. A Kaiche le ha gustado tanto Euskadi, que quiere quedarse a vivir aquí. Busca trabajo y está entrenando con el Goierri de baloncesto. “Ya habla unas palabras en euskera y los del Goierri están deseando que juegue con ellos. Es un chico muy sencillo y educado”.

Buena prueba de ello es que responde educadamente a todos los que se le acercan, sobre todo a los niños. Y estos le adoran. Ayer, mientras tomaba un café con un amigo argelino (Billel), no se atrevía a encender un cigarro porque había un niño cerca. Le tuvo que dar permiso el padre del pequeño. “Me encantan los niños. Y les caigo muy bien. Todos se me acercan y algunos ya me llaman por mi nombre. A todos les digo que coman sano. Si veo que un niño está enfadado o triste, le pido permiso a sus padres para jugar un poco con él y enseguida comienza a sonreír”.

En Urretxu y Zumarraga se siente más feliz que en Barcelona. “Pablo y su mujer están siendo muy amables conmigo y Billel me está enseñando los dos pueblos. Me encanta el paisaje. Me recuerda al de la serie de dibujos animados Heidi. Y la gente es muy maja. Quiero encontrar trabajo para poder quedarme a vivir aquí y jugar con el Goierri. Tengo experiencia como vigilante, pintor, limpiador, jardinero...”. Ojalá tengas suerte Saad. Los urretxuarras y zumarragarras ya la han tenido, al conocerte.