tolosa - Estamos a principios de mes, así que la tienda Zuzeu -oficialmente todo en mayúsculas-, está hasta arriba de ropa por catalogar y etiquetar. Los últimos siete días de cada mes, Lidia Hernández recoge y selecciona en su comercio las prendas que después lucirán sus perchas y estanterías. Frente al escaparate tiene dos sillas y una pequeña escalera de madera en la que tomar el café. Y es que este pequeño local de la calle Mayor de Tolosa es más que una tienda de segunda mano al uso.
A punto de cumplir tres años en agosto, el negocio dio sus primeros pasos a raíz de un proyecto conjunto entre el Ayuntamiento de Tolosa y la Asociación de Comerciantes. A fin de rehabilitar la parte baja de la calle Mayor, en aquel momento con una baja densidad comercial, se convocó un concurso de ideas de negocio innovadoras. Los impulsores quisieron enfocar la iniciativa hacia lo artístico, el reciclaje y la artesanía, para crear algo así como un Artekale, una Calle del Arte. Así nació Zuzeu, una tienda de prendas de segunda mano, de productos de diferentes partes del mundo, de pitxias y complementos personalizados y un lugar donde sentirse en casa.
Lidia trabajaba en una tienda de ropa cuando vio la oportunidad de crear algo nuevo: “Me di cuenta de que a mucha gente le gusta comprar ropa, aunque luego apenas la lleguen a utilizar”.
Viajó por Europa y comprobó de primera mano que la idea que empezaba a tomar forma en su cabeza no era tan descabellada y ya existía fuera de aquí. “Hay locales donde se intercambian libros, tiendas en las que la gente deja vinilos para que otro se los lleve y demás. Me encantó, pero me pareció que no eran negocios realistas para un lugar en el que el mercado de segunda mano aún no se entiende con la misma naturalidad. Aquí aún muchos piensan en Emaús cuando oyen hablar de ropa de segunda mano”, dice- Pero su idea de reutilizar y reciclar la ropa encajaba con el tipo de proyecto al que estaba dirigida la iniciativa y se lanzó.
La joven de apenas 25 años se propuso crear una manera más económica y sostenible de comprar ropa en Tolosa, creando un sistema mediante el cual la gente puede vender las prendas que ya no utiliza. Cree en la ropa de buena calidad y en la reutilización de prendas que duran para siempre y quiso demostrar con este proyecto innovador en la localidad que se puede vestir bien sin gastar de más. Además, vio la oportunidad de poner de su parte para disminuir en la medida de lo posible el impacto que generan las grandes marcas del fast fashion.
El negocio ha ido evolucionando con el paso del tiempo. “Ha ido madurando a la vez que yo”, explica la dueña tolosarra, que se siente “muy identificada con mi tienda”. Cuando abrió sus puertas, Zuzeu tenía una pequeña sección de hombre y de bebé, aunque hoy en día está dirigida casi en exclusiva a un público femenino puesto que las mujeres son las que compran más.
El proveedor principal es la gente que tiene ropa en casa sin utilizar. La última semana de cada mes Lidia recoge en la misma tienda los artículos que le traen sus clientas y hace una selección con aquellos a los que les ve salida. Por un lado, compra en el momento las prendas procedentes de casas como Zara, Mango, H&M y demás, por las que paga entre uno y seis euros. Y por otro, cuando se trata de prendas caras, acuerda un precio con la dueña y se la queda en depósito hasta que se vende y se reparten el dinero. También intenta viajar a Londres o a Berlín una vez al año para recorrer durante dos días los mercados de allí y luego revender los hallazgos en su tienda.
En local está lleno de colorido y tiene casi de todo. Una de las perchas está dedicada a la ropa de marca, aunque la mayoría de las prendas son del estilo Inditex. Hay bolsos y accesorios que le han ido trayendo de India y algún que otro lugar exótico, una mesa-taller en la que crear los complementos que hace por encargo, un probador y originales espejos repartidos por las paredes. Incluso hay una minimesa en la que los niños pintan dibujos para después colgar en la pared. La tienda es en sí misma un museo dedicado a la moda y a la compra consciente.