"La modalidad tiro con arco 3D es algo así como una fusión entre el tiro de precisión y la caza"

Zestoa. Tras competir en lugares como Santander, Burgos o Francia, y haber ganado diversas competiciones, hace unas semanas Johnny Tamayo se hizo con el primer premio del XIX campeonato de Euskadi de tiro con arco 3D. Tras un tiempo entrenando en el club de tiro con arco de Ordizia, acaba de empezar a entrenar en el Club Zarta de Elgoibar, un lugar donde, según Tamayo, "cuentan con muy buena instalación para sala".

¿En qué consiste esta modalidad?

Se suele hacer un circuito en el bosque y consiste en disparar a unas siluetas de gomaespuma que son réplicas de animales a tamaño real. Los animales tienen marcadas las zonas vitales, el pulmón y el corazón. Si lo hieres y no le das ni en el corazón ni en el pulmón, consigues cinco puntos, si le das en el pulmón ocho, y si le das en el corazón diez. Nos dividimos en patrullas, es decir, pequeñas cuadrillas de cuatro o cinco arqueros, y hacemos un recorrido que está marcado con unas balizas. Cada vez que nos encontramos con una diana disponemos de un minuto y medio para disparar dos flechas.

¿A qué distancia se encuentran esa silueta de animal?

No sabemos a qué distancia se encuentra, y en ese minuto y medio tenemos que calcular a qué distancia se encuentra, el desnivel del terreno, observar si la rama se está moviendo o no En sala se sabe a qué distancia se encuentra el objetivo, pero el tiro con arco 3D es una fusión entre el tiro de precisión y la caza, porque el arquero de precisión no tiene ningún obstáculo, pero aquí te puede tocar un zarzal y tienes que encontrar un hueco. Se trata de reglar el arco lo más preciso posible para esa distancia, que suele estar entre 5 y 45 metros.

¿Cómo llegaste a este deporte?

Acabábamos de comprar la casa y estábamos conociendo a los vecinos. Así, empecé a hacer migas con un vecino llamado Oscar, y por casualidad me presentó a José Luis, un arquero de Zumaia. Entonces quería hacer deporte pero no me decantaba por ninguno, y José Luis me propuso probar el arco. Fue pegar los primeros tiros y me enganchó. Hace ya unos nueve años de esto.

¿Con qué frecuencia entrenas?

Suelo intentar, como mínimo, tirar dos veces a la semana, y también dedico tiempo a la técnica. Además, miro en Internet los nuevos materiales, las nuevas tendencias

¿Sueles entrenar en el bosque o en salas?

Entreno en el patio del colegio de Zestoa. El Ayuntamiento me tiene cedido el patio del colegio, algo que agradezco muchísimo, porque gracias a esos entrenamientos he conseguido evolucionar mucho. También suelo ir a Sastarrain para conseguir situaciones lo más reales posibles. Incluso cuando llueve me voy a entrenar allí, porque no es lo mismo tirar un arco cuando te está entrando una gota de agua en el oído. Son cosas que hay que entrenar porque son situaciones que se pueden dar en competiciones.

¿Cómo ves la situación del deporte?

Aunque meterse en competiciones da pereza a la gente, cada vez hay más gente que va al club a tirar. Además, también hay chicas que tiran, y cada vez se están animando más.

¿Animarías a la gente a probar este deporte?

Por supuesto. A mí me ha valido mucho en lo personal y en lo profesional. He aprendido a controlar los nervios y también me ha ayudado a tener esa capacidad de reacción mucho más viva. Además, lo mismo puedes estar compitiendo con un veterano que con una persona joven. Hay mucha mezcla de edad en este deporte, y me parece muy bonito.

¿Qué tienes en mente ahora?

Quiero tirar hacía la precisión. No voy a dejar el tiro con arco 3D, pero así volvería a la técnica pura y dura, y aunque en el bosque tienes que amoldarte, se necesita una técnica buena y depurada. Quiero probar suerte, y ahora me toca a mí sacar información sobre sala y precisión.