Todos relacionamos Idiazabal con el primer sector, pero sus productos más internacionales los produce la industria. Concretamente, la empresa Ampo. Esta cooperativa, que fabrica válvulas para las principales plataformas petrolíferas y gasísticas del mundo, celebra este año su 50º aniversario.

La empresa la crearon una treintena de socios, en la época en la que el debate sobre el reparto del capital estaba en pleno apogeo. Decidieron poner en marcha un proyecto similar a los que por aquel entonces ya funcionaban en Arrasate. Muchos de aquellos emprendedores renunciaron a un empleo fijo para poder hacer realidad su sueño.

Además, a comienzos de los años 70 echaron un cable a los compañeros de Poyam. Esta empresa estaba en quiebra por un pedido impagado y los socios de Ampo decidieron hacerse cargo de ella.

En la actualidad cuentan con 500 trabajadores en Euskadi y otros 200 en India. Su presidente, el lazkaotarra Jon Agirre, comenta que aunque coyuntura a nivel mundial "es complicada", confían en seguir identificando las oportunidades existentes. "Estamos dispuestos a diversificar nuestra producción, pero sin renunciar a seguir en la cima en nuestro campo: la explotación de pozos submarinos de gas y petróleo", resume.

Sus válvulas y sus piezas para válvulas se pueden encontrar en las principales plataformas del mundo. Los productos de Ampo están preparados para soportar las condiciones más duras. Agirre comenta que el gas se pasa a estado líquido antes de transportarlo y que para eso su temperatura debe bajar a -196º. No todas las válvulas pueden pueden soportar esa temperatura. Las que se hacen en Goierri, sí. "Dicen que si explotase la planta de gas situada junto al aeropuerto de Barcelona, volaría toda la ciudad. Sus tanques están preparados para soportar la colisión de un Boeing 747". Allí también hay piezas made in Idiazabal.

El prestigio alcanzado y las características del campo en el que trabajan, han hecho que no les haya afectado la crisis. "En España vendemos solo el 2% de nuestra producción y en Europa el 18%. El resto lo vendemos en América, Asia, Australia... Uno de nuestros principales mercados es China. Están construyendo grandes instalaciones, pero todavía no tienen capacidad para producir materiales punteros y se ven obligados a comprarlos".

Agirre comenta que el secreto del éxito está en el trabajo, la ilusión y la investigación. "El hecho de estar en Goierri nos ha ayudado mucho. En esta comarca tenemos un centro de investigación, una escuela de ingeniería, un centro de Formación Profesional... Goierri Eskola también ha cumplido 50 años. En este medio siglo ha dado miles de profesionales y ese conocimiento está totalmente insertado en la comarca. Me ha tocado viajar mucho al extranjero y puedo decir que estamos a la par de las naciones más avanzadas. La formación es muy importante".

De cara al futuro, prevén abrir una tercera planta en América. "Si el cliente nos pide 30 válvulas de alto nivel y 70 corrientes, tenemos que darle eso. Si no, buscará otro suministrador. Y para hacer válvulas corrientes necesitamos salir fuera". Ese es el motivo por el que en su día abrieron una fábrica en India y abrirán otra en América.

Pero antes, celebrarán el 50º aniversario. "Hemos creado diez grupos de trabajo. Cada uno abarca un campo: la sociedad, las instituciones, los clientes, los proveedores, el pueblo de Idiazabal, los jubilados de la empresa... También tenemos intención de trabajar con las asociaciones del resto de los pueblos de la comarca".

En cuanto a los actos en sí, el pistoletazo de salida lo dieron en las fiestas de Idiazabal. Fueron los encargados de leer el pregón y participaron en el cross de una manera muy especial: la carrera pasó por dentro de la fábrica y dos trabajadores de Ampo tomaron parte en la prueba disfrazados de válvula y de cuchara respectivamente. El que iba dentro de la válvula era el propio Agirre.

También tienen previsto organizar una conferencia sobre la creatividad, invitar a los clientes y proveedores de todo el mundo y celebrar una fiesta en la planta de India. Como en toda fiesta organizada por vascos, habrá una comida popular. Y como en toda fiesta que se celebra en India, jugarán un partido de cricket. Los de Idiazabal están ensayando ya con el bate.

Pero el mayor reto del año es renovar la casa que acogía las oficinas de la fábrica de limas. "Le llamaremos Sorkuntzaren Etxea. Será un espacio para la reflexión, contará con un museo y nos servirá para acoger a las visitas. Estará en contacto con la naturaleza: tendrá una huerta. Empresas como Google cuentan con espacios similares".

Las obras ya han arrancado. El encargado de las mismas es el prestigioso arquitecto catalán Enric Ruiz Geli. Una construcción suya, el Media-Tic de Barcelona, fue nombrado mejor edificio del mundo en 2011. El de Ampo se inaugurará este año. "Es un edificio maravilloso: soleado, amplio, con vistas a Txindoki y Aizkorri...". Ideal para abrirse al mundo sin olvidar dónde están las raíces.

La opinión del alcalde Los idiazabaldarras están orgullosos de contar con una empresa como Ampo, por supuesto. El alcalde, Ioritz Imaz, comenta que es una pieza "muy importante" de la localidad. "La mayoría de sus fundadores son de Idiazabal y ha traído bienestar y prosperidad. Además, el hecho de que sea una cooperativa hace que los trabajadores asuman responsabilidades y eso redunda en beneficio del pueblo".

Imaz destaca la estrecha relación entre la cooperativa y el pueblo. "Hoy en día nadie imagina Idiazabal sin Ampo ni Ampo sin Idiazabal. El pueblo fue muy importante en la fundación de Ampo y en la actualidad Ampo es muy importante para el pueblo. Lo están haciendo muy bien y les deseo que sigan haciéndolo así".