Bertako gaia
Pero si el Seminario era una parada obligatoria para los txikis, no lo era menos para quienes quisieron colmar el apetito a base de talos, chorizo y sidra. La popular fiesta de la antesala de la Semana Santa discurrió a buen ritmo, aunque sin aglomeraciones.
Como de costumbre, la avenida Ibargarai fue el recinto para exhibir las razas de ganado bovino, que compartieron protagonismo con el concurso de txorimalos de Jardun. Unos metros más adelante, en Fraiskozuri, los expositores de alimentación ofrecían un amplio muestrario de delicias para el paladar. Algunos no pudieron resistirse. "He comprado unas rosquillas y un pastel vasco. En casa somos bastante golosos", explicaba Lupe López, que no perdía detalle de los puestos engalanados con repostería, txakoli, embutidos y conservas, entre otros productos. Mientras tanto, el arte hablaba con voz propia en los alrededores del edificio consistorial. Cesteros, zapateros, jugueteros, tejedores... Así hasta más de una veintena de artesanos engalanaron la plaza San Martín.
El goteo de gente empezó a notarse al mediodía. El punto de unión del paseo Irizar y la calle Domingo Irala acogió uno de los grandes atractivos de la jornada: la exhibición de castellers a cargo de la agrupación (la colla) de Sant Cugat del Vallés, que visitó la villa mahonera invitada por Gure Esku Dago, la dinámica por el derecho a decidir. El espectáculo, que estuvo abarrotado de público, contó con la participación de 166 miembros del grupo barcelonés creado en 1996. "La gente tiene que estar en silencio para que podamos oír bien las instrucciones del cap (el jefe) de la colla", explicaba Jaume, uno de los miembros del colectivo que llegó a construir hasta una torre humana de siete pisos de alto.
castellers hoy en arrasate Los bergararras exprimieron a tope la feria de Ramos que además de sus clásicos ingredientes, sumó atractivos de altura. Los castellers de Sant Cugat del Vallés recalarán hoy en Arrasate de la mano del movimiento Gure Esku Dago.
En la villa cerrajera los actos se desarrollarán en la Herriko plaza (si hace mal tiempo, en Uarkape), donde a partir de las 11.30 horas, carniceros del sello Giokela prepararán pintxos. Media hora más tarde se formará una cadena humana, uniendo los arcos del Casco Histórico. Tras la actuación de los gaiteros y la comparsa de gigantes y kilikis, será el turno de los castillos humanos (13.00 horas).
