Lizartza - Aski da! Eskola berria orain! Este fue el lema elegido para denunciar la "lamentable situación" en la que se encuentran las instalaciones de la escuela pública de Lizartza. Los padres y madres de los 81 alumnos y alumnas han decidido salir a la palestra pública y exigir a la consejería de Educación del Gobierno Vasco "una escuela digna". En change.org han iniciado, además, una recogida de firmas que presentarán ante la consejería.

A la escuela de Lizartza acuden diariamente alumnos del propio municipio y también de la localidad vecina de Orexa. Hace diez años que comenzaron los contactos con la consejería de Educación para solicitar una escuela nueva y desde la asociación de padres y madres lamentan que "hoy en día todo siga igual". "En esta década el índice de natalidad ha aumentado en Lizar-tza y por ello cada vez tenemos más problemas de espacio; la situación en la que estamos ya es crítica y nos sentimos totalmente olvidados", manifestaron ayer las portavoces de los padres y madres, Leire Gordo e Itziar Sanz de Ojer.

Así, de ser 27 alumnos en el año 2000, la pequeña escuela ha pasado a tener 81 alumnos. "Técnicos del departamento de Educación han visitado las instalaciones en todo este tiempo en diversas ocasiones y siempre nos han dicho que tenemos razón, que las condiciones en las que están nuestros hijos e hijas no son adecuadas, pero la única modificación que han hecho ha sido añadir un módulo prefabricado", declararon las portavoces.

Desde la asociación de padres y madres advierten de que en este momento no se cumplen las medidas de seguridad mínimas que se exigen a un centro escolar. "La fotocopiadora está metida en un baño, hay tres baños para 40 alumnos y un espacio de apenas 15m2 cumple las funciones de sala de reuniones de trece profesores, sala de dirección y comedor de los profesores", relatan desde la comunidad educativa del centro. El edificio se divide, además, en dos plantas con escaleras empinadas para acceder al piso superior, y un escalón para el primero. "¿Ya no nos preocupan las barreras arquitectónicas?", se preguntan los padres y madres.

Asimismo, las aulas de música, psicomotricidad y el comedor se encuentran fuera del edificio. "Nuestros hijos tienen que cruzar todos los días la carretera para acceder a estas dependencias, con el riesgo que conlleva", se lamentan.

Aseguran que las instituciones conocen la "situación vergonzosa y penosa" en la que se encuentran los alumnos y alumnas de la escuela pública de Lizartza. "Reconocen que necesitamos un colegio en condiciones pero no han hecho nada. Siempre nos han dedicado palabras bonitas, pero la situación sigue igual", denuncian.

La concentración que tuvo lugar ayer en el exterior del centro escolar es la primera acción que han llevado a cabo desde la asociación de padres y madres, pero si no reciben repuesta por parte de la consejería de Educación pretenden ir más allá e intensificar sus protestas. "Nos reunimos semanalmente y hemos formado una comisión especial que se está encargando del tema. Estamos analizando qué podemos hacer para que nuestra demanda tenga el máximo eco posible", declararon Leire Ojer e Itziar Sanz de Ojer.

Por el momento ya han comenzado a recoger firmas a través de la web change.org y animan a los vecinos de Tolosaldea a firmar para "mantener en condiciones dignas las escuelas pequeñas".