bergara. Entre paredes se desenvuelve como pez en el agua. Mikel Linazisoro, el spiderman bergararra, acredita una meteórica progresión en la escalada deportiva. Cuando tenía doce años encadenó su primer 8c (White Zombie, en Baltzola). Con trece años ya cumplidos, y dentro de la escuela guipuzcoana, ha firmado otros dos 8c con Mala vida (septiembre) y Honky Tonky (noviembre), además de saltar al 8c+ (Koldoren Mundua); las tres en Araotz. Pero antes ha cosechado otros muchos logros. Y llenado la vitrina de títulos porque también participa en competiciones. Le acompaña en la entrevista su entrenador del Centro de Tecnificación de la Federación Vasca, el bergararra Josean Mulas, a quién Linazisoro considera "un maestro". A continuación, el protagonista de estas líneas desgrana su pasión por las alturas, una disciplina donde ha dado sobradas muestras de destreza.
¿Cómo empezaste a escalar?
Comencé a escalar con cinco o seis años. Arkaitz Yurrita, el entrenador de esquí de mi hermano Ibai en el Pirineo Aragonés, me animó a probar esta modalidad. Luego íbamos a escalar en familia. Con el tiempo me crucé por el camino con Josean, que es mi entrenador desde hace más de dos años y medio. Me animó un día a que fuese a escalar con él y así empecé a entrenar.
Y te enganchó...
Sí, desde entonces no lo he dejado.
¿Qué te aporta la escalada?
A mi edad me lo tomo, de momento, como un juego, para pasármelo bien. Los entrenamientos, además, están basados en la diversión. Disfruto haciendo vías cada vez más difíciles. Me lo planteo como una superación de retos, es lo que me motiva.
¿Recomendarías la práctica de este deporte?
Por supuesto. Aunque mis amigos y otros muchos chavales de mi edad prefieren jugar al fútbol (esboza una sonrisa). Disfrutas haciendo deporte y, al mismo tiempo, la escalada te permite compartir muchísimas cosas con mucha gente de diferentes edades. Eso es enriquecedor. Somos una pequeña familia.
¿No te dan respeto las alturas?
Es una sensación especial la que se siente cuando estás arriba. Al principio me daba miedo volar. Pero cuando comencé a escalar con Josean me enseñó las rutinas que tenemos los escaladores y me aportó esa seguridad que me hacía falta.
¿Cuándo entrenas?
Suelo entrenar entre dos y tres días en el rocódromo del polideportivo de Aretxabaleta. Los fines de semana, siempre que puedo, lo hago en roca. En Araotz (Oñati), que está cerca de casa. Es un sitio conocido que tiene un poco de todo: placa, desplome, vías fáciles, difíciles... También me gusta ir a Baltzola (Bizkaia), Valdegovía (Araba) o Etxauri (Iruñea).
Tu prometedora carrera escaladora dio a finales del pasado octubre un nuevo paso adelante. Encadenaste tu primer 8c+, convirtiéndote en el escalador más joven a nivel del Estado que cuenta con este grado en su currículum deportivo.
Así es. Es mi mayor reto hasta ahora. Lo llevé a cabo en la vía Koldoren Mundua, en el sector de Korea de Araotz. Tardé unos doce días en un mes. (Mulas explica que Mikel es el primer escalador que con su edad ha logrado este grado, al alcance de muy poca gente, en el Estado. A nivel mundial, con sus años, solo lo han rubricado cuatro o cinco personas).
¿Qué características tiene 'Koldoren Mundua'? ¿A qué se debe su nombre?
Es una vía de cerca de 30 metros con un primer tramo de fuerza resistencia, después un bloque duro, reposo y luego ya empieza la resistencia hasta arriba. La abrió un chico de Elorrio y le puso el nombre por su hijo Koldo. La primera ascensión es obra de Gorka Karapeto y la propuso de 8c+.
¿Quién te recomendó ir a por ella?
Josean (le mira a su entrenador en un gesto de complicidad), pensaba que era un desafío para mí. Es dura; de hecho, hubo una sección que me costó, pero he aprendido mucho.
¿Cómo te sientes?
Contento y satisfecho. Con ganas de seguir adelante.
¿Cuál será tu próxima aventura?
A ver si puedo lograr más 8c+ en Baltzola o Etxauri. Tengo algunos objetivos e intentaré ir a por ellos.
Por otro lado, ¿también participas en competiciones?
Sí. Recientemente he tomado parte en sendos campeonatos de Euskadi que se han celebrado en Aretxabaleta y Pamplona donde he ganado en mi categoría sub-16. En 2012, por ejemplo, quedé campeón de Euskadi sub-16 de dificultad y campeón de la Copa de España de Dificultad sub-16. Este año he terminado subcampeón de España sub-16 de dificultad.
Además, combinas la escalada con el esquí alpino.
Con el esquí empecé desde pequeño en Jaca. De hecho, el gusanillo de la escalada me entró a través del esquí (en este momento ostenta el título de campeón de España en la categoría infantil). Las dos modalidades me llenan mucho. En esta temporada también participaré en competiciones de esquí. Y me gusta el surf (sonríe).