Los vecinos de Amaroz, en Tolosa, piden un "espacio multifuncional cubierto"
La empresa pública Orubide no estaría dispuesta a asumir el coste de la cubiertaLa asociación vecinal cree que es "una prioridad" para la socialización de los futuros nuevos vecinos
Tolosa. En poco tiempo Amaroz sufrirá una notable transformación con la ampliación del barrio, ya que el Gobierno Vasco construirá en total cerca de 300 viviendas en el lugar que ocupaba la antigua papelera. Entre las antiguas viviendas y las de nueva construcción, quedará una zona verde y se prevé la construcción de un frontón multifuncional. Los vecinos solicitan una vez más que este espacio sea cubierto, ya que esta fue una de las propuestas que más adhesiones tuvo cuando se hizo la consulta ciudadana el año pasado.
Sin embargo, Orubide, la sociedad pública dependiente del Gobierno Vasco y encargada de desarrollar el proyecto, no parece que contemple esta posibilidad. "Si realmente existen prioridades a la hora de establecer el plan de dotaciones de Amaroz, la más importante es la de poder contar con un espacio cubierto. Ha sido la reivindicación más demandada desde hace años por parte de la comunidad vecinal, petición que quedó claramente reflejada en la consulta ciudadana llevada a cabo el año pasado y en la que participaron más de 300 vecinos y vecinas", alegan los portavoces de la asociación vecinal.
Teniendo en cuenta que el barrio cuenta en la actualidad con 500 viviendas, a la cuales hay que sumar otras 150 que se construirán en un futuro inmediato y 150 más previstas en el proyecto definitivo, los habitantes de este barrio de Tolosa entienden que su solicitud tiene ahora más urgencia que nunca.
En función del proyecto, en la zona de la antigua papelera se planteó la construcción de un frontón cubierto, que a su vez respondiera a las necesidades de los vecinos, es decir, poder llevar a cabo actividades de ocio, conciertos, teatro... Estaba previsto que el coste de cubrir este equipamiento deportivo lo asumiera Orubide, pero la realidad actual es bien distinta y finalmente no se ha previsto revestir la instalación, por motivos de índole económica. Por lo tanto, se plantea que si se quiere cubrir el frontón (actuación cifrada en unos 700.000 euros), esa cantidad deberá retrotraerse del importe total que el Ayuntamiento debe percibir, en concepto del 10% que le corresponde recibir por la ejecución del proyecto total de edificación.
Amarozko Auzo Elkartea considera "desorbitado" el coste de la instalación de una txapela al frontón y, por lo tanto, "inasumible" por su parte. "La aceptación de esta propuesta supondría hipotecar sustancialmente la posibilidad de responder al resto de prioridades igualmente necesarias", argumentan.
Aun y todo, los amaroztarras opinan que el compromiso de Orubide respecto a la construcción del frontón-polideportivo y multifuncional debe llevarse a cabo aún sin la cubierta prometida en su día: "Dicha dotación, tal y como está planteada, no cabe duda de que servirá de punto de encuentro, relación y convivencia, con aquellas personas que adquieran las nuevas viviendas y se incorporen a nuestra comunidad vecinal". No obstante, seguirán luchando por un espacio cubierto para el barrio, la mayor prioridad de los vecinos.