Hasta la bandera. El salón de plenos del Ayuntamiento donostiarra se vio ayer al atardecer repleto de ciudadanos en la primera recepción oficial que celebró el nuevo Gobierno de la coalición Bildu. Cerca de dos centenares de vecinos se reunieron en la sala de la casa consistorial. Tal fue la cantidad de personas que se acercaron que con las sillas habilitadas no fue suficiente, por lo que los palcos tuvieron que ser ocupados. Aun y todo, muchos asistentes tuvieron que permanecer de pie.

En primer lugar, uno a uno, todos los componentes del Gobierno se presentaron -exceptuando el edil de Alternatiba, Jon Albizu, que no se sentó juntó a sus compañeros-. El nuevo alcalde, Juan Karlos Izagirre, incidió en la idea de que aquella recepción no era "una reunión de trabajo", sino una manera de darse a conocer y conocer a los colectivos sociales de la ciudad.

Después, presentaron a los asistentes los ejes principales de su programa, e hicieron especial hincapié en el apartado de información y participación. En este punto, Izagirre aseguró que en las próximas semanas visitarán "todos los barrios y los pueblos" que componen Donostia, e intentarán acercar los debates que allí se planteen a la realidad del Ayuntamiento. Asimismo, el regidor quiso felicitar la nueva composición de Igeldoko Herri Kontseilua y a Zubietako Herri Batzarra.

Tras finalizar la alocución del Gobierno comenzaron a tomar la palabra representantes de las más de las cien asociaciones que se acercaron. Todos felicitaron la predisposición del Gobierno de Bildu para reunirse con las asociaciones y también mostraron sus preocupaciones sobre la ciudad.

Raúl Pérez, representante de la asociación de vecinos de Riberas de Loiola, tomó la palabra para reclamar una sede para su asociación. Por otro lado, Justo Gárate de Altza, deseó que su barrio en vuelva en 2015 a ser un pueblo. También intervino Gerardo Suárez, víctima del terrorismo de la extrema derecha y a título personal deseó que el nuevo Gobierno trabaje por el reconocimiento de estas víctimas. Izar Errandonea, de la Asociación de Retornados Vascos, agradeció la oportunidad de participación que brinda Bildu a los ciudadanos. Josu Rezola, de Altza XXI, compartió la opinión de Errandonea, y aseguró que en los mandatos de Elorza su barrio ha vivido "apartado" y sus reivindicaciones nunca han sido atendidas.

Los acampados del Boulevard también enviaron a un par de representantes. Félix agradeció la oportunidad e indicó que el colectivo 15-M se siente "la voz de algo que acaba de iniciarse".

Por parte del colectivo Piratak, Haritz Barela se congratuló de la buena disposición de la coalición con respecto a las fiestas populares. Además de estas personas, tomaron la palabra representantes de Haritzalde, Agipase, Kortxoenea Gaztetxea y de la Plataforma de Parados de la Construcción de Gipuzkoa, entre otros.

Por otra parte, el concejal socialista Ernesto Gasco recordó que ese tipo de actos son habituales al comienzo de una legislatura y que el anterior alcalde, Odón Elorza, también recibió a los agentes sociales y asociaciones de vecinos. "Pero lo hizo con un programa concreto y peticiones concretas", apostilló, al tiempo que incidió en que espera que la participación ciudadana que fomente el Gobierno de Bildu mejore, "porque de momento está siendo peor" que la anterior.