EL cielo plomizo no dejó ayer brillar al sol hasta bien entrado el mediodía, por lo que muchos errenteriarras se desanimaron a subir al monte San Marcos para celebrar la tradicional romería.
Muchos vecinos de la villa papelera optaron por visitar la feria de artesanía del País Vasco o se sumaron a las fiestas de los barrios de Pontika e Iztieta.
Quienes primero notaron la bajada de visitantes fueron los dueños de los puestos de bizcochos y rosquillas y las carpas de las asociaciones locales de la Concha Rociera y el centro Extremeño Monfragüe. "Al mediodía se ha empezado a animar un poco la cosa, pero se nota que hay bastante menos gente que en los anteriores años", comentaban a los clientes que se acercaban a comprar sus productos.
"Supongo que ha sido por el tiempo por lo que hay menos gente que en años anteriores", indicó el presidente del centro extremeño, Ángel Mateo. En su carpa se podían degustar productos típicos de su tierra: dulces como rosquillas, pestiños, roscas de vino, floretas; licores y cremas de bellota; vino de Extremadura; queso de Almonte; chorizo de Monte Mayor, pero sidra de Oiartzun. Todo ello en un enclave privilegiado como es el monte San Marcos de Errenteria.
programa
Cross, misa y deporte rural
La romería arrancó con la prueba de atletismo de la subida a San Marcos que organiza cada año el Club Atlético Rentería (CAR). Cerca de 60 corredores tomaron la salida. "Pensábamos que por el mal tiempo menos gente se iba a apuntar, pero ha habido tantos corredores como otros años, así que estamos muy contentos", señaló el marchador Mikel Odriozola, miembro de la organización. Entre los hombres el podio lo formaron Ibon Esparza, Mikel Albéniz y el errenteriarra Ángel Macías.
Las féminas más rápidas fueron Ana González (CAR), Susana Ruiz y Esther Estefanía (CAR).
Los trikitilaris de Azpeitia animaron parte de la mañana hasta que pasadas las 12.00 horas comenzó la misa en la campa. Este año el párroco, Benito Ijurra, promotor de la romería, no pudo acudir por motivos de salud. Así, el cura encargado de oficiar la ceremonia fue Joseba Goñi.
Tras la celebración comenzó la exhibición de deportes rurales. Los harrijasotzailes Iñaki y su hijo Inaxio Perurena midieron sus fuerzas con seis piedras de diferentes formas y pesos. Además, los aizkolaris Julen Cañamares y Mugerza cortaron ocho kanaerdikos.
Como novedad, Cañamares realizó una demostración de corte artístico de troncos con motosierra.
Fueron muchas las familias que para esa hora ya habían subido a la campa ubicada frente al fuerte. Andando desde Beraun o Zamalbide o en el servicio especial de autobús que puso el Ayuntamiento, la afluencia de gente fue creciendo.
El fuerte
Escultural exposición
Otro de los atractivos del día de ayer era poder comprobar las últimas mejoras que se han efectuado en el fuerte de San Marcos, reconvertido en un espacio lúdico cultural que mantendrá abiertas sus puertas hasta el 20 de octubre. Desde su terraza se divisa toda la comarca de Oarsoaldea, hasta Donostia.
Al menos durante tres meses se podrá disfrutar de la exposición de esculturas que adornan el foso de la fortaleza. La iniciativa Jardín Galería combina arte con naturaleza y ha dado la oportunidad a los artistas Jon Iñaki Ormazabal, Álvaro Ledesma y al dúo Balerdi de exponer sus obras.
