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El primer curso de cocina para hombres de Tolosa supera todas las previsiones

La asociación Berdinbide persigue la concienciación sobre las tareas del hogar El colectivo por la igualdad también prevé un cursillo de lavado y plancha, de limpieza, o de cuidado de los niños

El primer curso de cocina para hombres de Tolosa supera todas las previsionesFoto: m.s.s.

Tolosa. Resulta que la pasión por la cocina está muy extendida en Tolosa entre el sexo masculino. Perplejos se han quedado los integrantes de la Asociación de Hombres por la Igualdad Berdinbide al constatar que más de 60 varones han dado su nombre en el primer curso de cocina para hombres organizado en la villa, cuando en realidad esperaban impartir un curso para no más de una docena de alumnos. Pero, ¿dónde queda el papel masculino en el resto de tareas del hogar?

El representante de Berdinbide, Jesús Mari Penilla, reconoce que se han sentido desbordados por la demanda. "No lo esperábamos. Hemos comenzado con un curso de 30 personas y tenemos la intención de poner en marcha un segundo curso en enero o febrero", manifestó el tolosarra.

En este sentido, Penilla explica que el objetivo último del curso es que "las tareas del hogar sean compartidas por hombres y mujeres", por lo que se ha optado por facilitar a los hombres que lo deseen los conocimientos culinarios necesarios para realizar parte de estas labores. Piensan en jóvenes que se incorporan a la vida en pareja, en hombres que van tomando conciencia que el trabajo del hogar no tiene de que recaer solo en la mujer, o el caso de hombres que han vivido una situación de dependencia de sus mujeres y se encuentran en una situación de separación o viudedad. "En la misma línea, es posible, que más adelante podamos organizar un cursillo de lavado y plancha, de limpieza, de cuidado de los niños, etc, es decir, que los hombres tomen conciencia de que los trabajos del hogar son cosas que también les competen", avanzó el portavoz de la asociación.

Algunos Datos Los miembros de Berdinbide echan mano del último barómetro del CIS para analizar la postura de los hombres ante el cuidado y las tareas domésticas. La mujer es la que realiza en el 60,4% de los casos los trabajos del hogar. Las respuestas ante la siguiente pregunta son sorprendentes: Y en caso de que uno de los miembros de la pareja tenga que trabajar menos, de forma remunerada, para ocuparse de las tareas del hogar y el cuidado de los hijos, ¿quién cree que debería ser? Casi la mitad, el 46%, responde que es la mujer la que ha de quedarse en casa, y es "demoledor" que sólo el 2% señalan al hombre para estas labores. Del resto, el 10% dice que quien tenga un trabajo peor remunerado, el 7% que depende de los casos y el 12% no se pronuncia.

"Es desalentador que hombres y mujeres digan, que de quedarse en casa alguien debe de ser la mujer. Subyace el pensamiento de que el trabajo profesional de la mujer es solamente un complemento económico necesario, pero no un reconocimiento a una carrera laboral o profesional", explica Jesús Mari Penilla, en nombre de Berdinbide. "Queda claro que la mujer se ha incorporado al mundo del trabajo, pero el hombre no al trabajo del hogar", añade.

Más allá de la realidad que nos dejan entrever dichos datos, el primer curso de cocina organizado en Tolosa está siendo un éxito rotundo y para muchos participantes una forma de diversión. El cocinero del restaurante Zuloaga Txiki, Iñaki Etxeberria, ha sido esta semana el encargado de impartir las clases en el Casino, y las siguientes semanas harán lo propio Roberto Ruiz y Sonia Tapia del Restaurante Frontón y Txemari Esteban del Botarri.

Lasaña de espinacas y champiñones y petit-choux de crema el primer día, y chipirones con arroz y pastel vasco en la segunda clase. "Sobre todo mi objetivo es darles ideas a la hora de ponerse el delantal. Al que le gusta comer, también le gusta cocinar. Los hombres tienen afición, y está claro que las mujeres de ahora no son como nuestras madres y los hombres tampoco como los de antes. Creo que se están resquebrajando los prototipos", defendió el chef Iñaki Arratibel mientras limpiaba los champiñones para la clase.

Jon Iraola es uno de los alumnos que está participando en el curso. "Desde siempre me ha gustado la cocina y cuando vi el curso me apunté rápidamente, porque intuía que iba a tener éxito. Me gustó la idea de que cocineros de Tolosa nos mostraran su forma de cocinar de manera informal", explicó el joven. El tolosarra José Francisco Cuerdo también asiste a las clases, porque quiere "que alguien me diga lo que está bien y mal", y aseguró que el responsable de los fogones en casa es él. Koldo Jauregi es otro de los alumnos que esta semana tomaba nota en el Casino: "Estoy jubilado y estoy buscando maneras de entretenerme. Me apasiona la cocina y mi mujer sabe que en casa eso es cosa mía", declaró.