Oiartzun. Trabajadores y empresarios de las naves ubicadas en el polígono industrial Talaia de Oiar-tzun, junto a la salida de la autopista, critican que el garbigune instalado hace unos meses en este área es antihigiénico e insalubre.

El garbigune se encuentra en frente del pabellón de Euskal Sofá. Los empleados y responsables de este taller emprendieron una recolección de firmas para pedir medidas que mantengan este espacio de recogida de residuos y de reciclaje en buen estado. "El 99,9% de los trabajadores y dueños de las cerca de 35 o 40 empresas de Talaia está en contra del garbigune", aseguran.

"Para empezar, éste no es el sitio adecuado para colocar este tipo de servicios. Sólo está vigilado cinco días a la semana en un horario limitado, por lo que muchos de los que vienen a depositar la basura o escombros se encuentran el recinto cerrado y dejan las bolsas fuera", explica uno de los empleados.

En este sentido, afirman que el garbigune no cumple las normas sanitarias: "Fuera del recinto hay unos dos metros de restos de podas que llevan unos meses aquí. Se están pudriendo y creando bichos. Hemos llegado a ver ratas por esta zona".

"En este espacio se juntan el garbigune y el servicio de urgencias de la recogida puerta a puerta para todos aquellos que no pueden esperar al día de la recogida, por ejemplo, porque se van de vacaciones. Entonces traen la basura orgánica aquí y como no lo recogen todos los días se crean fuertes olores", indica un trabajador, quien añade que es mucha gente la que todos los días se acerca aquí para echar los desperdicios.

Otro de los problemas que denuncian las empresas es que el garbigune es un reclamo para todas aquellas personas que se dedican como modo de vida a rebuscar en contenedores y basureros. Temen que aprovechen sus visitas a Talaia para investigar las actividades y enseres que se guardan en las naves.

Algunos trabajadores se pusieron en contacto con el Ayuntamiento de Oiartzun para exponerle sus preocupaciones. "La respuesta que recibimos fue que no esperaban que acudiera tanta gente y que el asunto se les ha ido de las manos".

En este sentido, el fin de semana el Consistorio envió a los medios un comunicado en el que reconoce que el garbigune ha superado todas las expectativas.

"Son muchos los vecinos que han utilizado el garbigune desde que se puso en marcha y muchos de los desperdicios que antes se iban al vertedero ahora se reciclan como es debido", apuntan en la nota. Pero acto seguido reconocen que el "garbigune se ha quedado pequeño".

Por ello anuncian que con la mayor brevedad el Ayuntamiento acondicionará el recinto para responder a las necesidades de los ciudadanos y ofrecer un mejor servicio. El Consistorio puntualiza que el actual área es provisional y que una vez que se acometan esas mejoras se convertirá en un servicio definitivo.

En este sentido, el Ayuntamiento felicita a la mayoría de los oiar-tzuarras porque "han entendido y aprendido el funcionamiento del garbigune y del puerta a puerta". Sin embargo, alerta que unos pocos no respetan el horario del servicio y que dejan la basura fuera. Por este motivo, recuerda que el garbigune está abierto de martes a sábado, en horario de 10.00 a 13.00 y de 17.00 a 20.00 horas y hace un llamamiento para que se respeten esas horas.