mientras los políticos se tiran la pelota unos al tejado de otros, el club deportivo de Zumaia sigue desde hace dos años sin contar con un frontón en condiciones para entrenar. La emblemática cancha centenaria de Odieta se encuentra en medio de unas obras paralizadas y el frontón largo que estaba previsto construir hace meses tendrá que esperar hasta la venta de una parcela de Ardantzabide, que acaba de obtener el Ayuntamiento.

La semana pasada, el Consistorio y Promociones Salbide, encargada de construir las viviendas en Ardan-tzabide, firmaron un nuevo convenio para buscar una solución ante la crisis económica. Y es que, según el acuerdo que firmó el anterior gobierno (PNV-EA) con la promotora en 2003, Salbide tenía que construir un frontón de 3 millones de euros a cambio de poder levantar 35 viviendas más en dicho barrio. Así, seis meses después de obtener la licencia de habitabilidad de las primeras casas, el frontón debía estar construido. De lo contrario, Salbide tendría que pagar una fianza. Pero no ha ocurrido ni lo uno ni lo otro. Según el actual equipo de gobierno (EA-Grupo Mixto, antiguo ANV), aquel acuerdo "malo" les ha llevado a tener que buscar una solución.

De este modo, la semana pasada acordaron lo siguiente: la promotora cedió una parcela de Ardantzabide al Ayuntamiento y con el dinero que reciba el Consistorio al vender el solar para construir hasta 40 viviendas, se levantará el frontón largo entre Branka y el gerontológico. El alcalde, Iñaki Agirrezabalaga (EA), subrayó que "hasta vender la parcela no habrá frontón largo".

El PNV fue el único partido del que no apoyó la propuesta y se abstuvo. "Estamos preocupados porque el Ayuntamiento ha tomado la responsabilidad de hacer el frontón en plena crisis. Esta situación la ha creado la impotencia y la lentitud del equipo de gobierno. Han reaccionado cuando la cuerda estaba a punto de romperse", criticó esta formación.

Odieta, también a la espera

Las obras se reanudan este año

Por otro lado, el equipo de gobierno aclaró esta semana por qué las obras de construcción de 26 viviendas en Odieta (trece para realojar a los vecinos del lugar y otras trece libres) están paralizadas desde hace meses y se reanudarán a finales de año. Y es que el pasado julio Zumaia Lan-tzen sacó a concurso la dirección de obras de Odieta, ya que en 2005 se adjudicó la obra a los arquitectos municipales "sin mencionar que recibirían 242.000 euros por esos trabajos". El estudio arquitectónico Urkain ganó el concurso y aseguró al Ayuntamiento que el proyecto incumplía las Normas Subsidiarias. Por ello, adecuarán el proyecto a las normas este mes. "Estamos desmontando el chiringuito del PNV y eso les pone nerviosos", indicó.

Ante estas acusaciones, el PNV aseguró "no estar nervioso pero sí muy preocupado", porque han pasado dos años y "el pueblo sigue sin un frontón y con una plaza que da vergüenza". Los jeltzales recordaron que fue el proyecto de Odieta lo que causó la ruptura entre PNV y EA en 2005, y que Zumaia Lantzen (con todos los partidos del Consistorio representados en el consejo) aprobó por unanimidad encargar a los arquitectos municipales el proyecto.

Ante este particular partido de pelota, NOTICIAS DE GIPUZKOA se ha reunido con los miembros del club deportivo para conocer cuál es su situación actual. Luis Mari Etxabe, responsable de cesta punta explica que llevan quince años pidiendo un frontón largo. Asimismo, el 19 de noviembre se cumplirán dos años desde que las máquinas entraron en Odieta, con el centenario frontón justo en la mitad. Durante este tiempo, los pelotaris han estado entrenando como han podido. Y es que antes de comenzar los trabajos de Odieta, los pelotaris practicaban en la emblemática cancha. Aunque admiten que había veces que se les quedaba pequeña y tenían que acudir a otros municipios de Gipuzkoa.

Los mejores pelotaris sin frontón

El esfuerzo de los tutores

El club cuenta con más de cien pelotaris y hace dos años, al ver que la localidad se iba a quedar sin cancha, el Ayuntamiento decidió construir un frontón cubierto en la Herri Eskola. "Desde que arrancaron las obras utilizamos este frontón. Pero acuden los más pequeños del club, el resto tiene que desplazarse a otros municipios", señala Etxabe. "La construcción de ese nuevo frontón en la Herri Eskola ha sido el lado más positivo de esta aventura", asegura Jesus Iribar, responsable de pelota mano. Pero eso no evita que los senior de pelota tengan que trasladarse a Urnieta. "Un frontón da mucha vida a un pueblo y ahora mismo somos un bicho atípico en Euskal Herria. Es una vergüenza su imagen actual", subraya Iribar.

En cesta punta se complica aún más la historia. "Los críos de entre diez y quince años acuden a Aizarnazabal y Getaria a entrenar. Pero no pueden acudir solos y los padres y madres se organizan para llevarles, lo que tiene mucho mérito porque, sobre todo en invierno, las carreteras son muy malas", se lamenta Etxabe.

Odieta ha visto crecer a buenos pelotaris como Goikoetxea y Enbile. "La gente nos pregunta cómo es posible tener los mejores pelotaris del mundo y no disponer de un frontón largo", concluye Etxabe.