Ya desde Tailandia, el actor Rodolfo Sancho trata de echar una mano a su hijo Daniel, en prisión provisional al haberse declarado culpable del asesinato y desmembramiento del cirujano plástico colombiano Edwin Arrieta. Actualmente, el joven se encuentra confinado, siguiendo el protocolo covid vigente en el país, por lo que se encuentra aislado y por el momento sólo puede visitarle su abogado. Daniel Sancho (29 años) ha ingresado en la cárcel de Koh Samui, al sureste de Tailandia. Tras haber estado con los investigadores recreando la noche en la que murió Edwin Arrieta y haberse declarado culpable, el joven se ha convertido en el principal sospechoso del asesinato del cirujano plástico colombiano.
Es precisamente en este punto donde la familia de Daniel ha tomado las primeras acciones, que no son otras que las de dejar de contar con el abogado de oficio que se le había asignado a Daniel Sancho y contratar a un letrado local, para que se haga cargo de la defensa del chef español.
En prisión provisional
Hay que recordar que la justicia tailandesa decretaba el pasado lunes, la prisión provisional para Daniel Sancho por el supuesto asesinato del cirujano colombiano Edwin Arrieta Arteaga y, aunque al parecer se ha declarado culpable, este martes su nuevo letrado comentaba a su salida de su primera visita que: “él sabe lo que hizo”.
El joven declaró que era “rehén” del colombiano, por lo que parece que la estrategia irá en el sentido de convertir a Daniel Sancho en la víctima del cirujano y que lo ocurrido es una consecuencia de ello. La prisión provisional, tal como comentaba su abogado, puede alargarse 84 días, en los que la policía tailandesa ha de armar el caso para presentarlo al juez.
Primer movimiento
El actor Rodolfo Sancho, padre del presunto asesino, se encuentra ya en la isla y este primer movimiento de asignación de un nuevo abogado es una muestra de que, al parecer, personal de la embajada española está ayudando a la familia para poder contextualizar la situación en un país ajeno a España, con leyes y cárceles muy distintas a las de nuestro país.
Khun Anan, el letrado de Daniel Sancho, también ha transmitido: “Creo que está relajado. Él sabe lo que hizo, le he explicado el proceso (...). Quiere planear cómo vivir aquí dentro", comentaba al salir de la visita. Las cárceles y su funcionamiento no son en Tailandia las mejores y al parecer, tener dinero para conseguir servicios a diario es mandatorio si se quiere tener comida y bebida, así como poder sobrellevar la estancia mientras los reos son hacinados en celdas.
