Gipuzkoa destaca por sus espectaculares restaurantes y su gastronomía única. Sin embargo, más allá de los restaurantes, también existen otros lugares donde poder deleitarse con una comida casera y única, como es el caso de las pastelerías.
Según la reconocida cuenta Guk Green, la que más trayectoria tiene de toda Euskadi es la Pastelería Sayalero, ubicada en Zarautz.
Uno de los aspectos a destacar de este local es que hacen unos espectaculares panettone galardonados a nivel nacional durante todo el año.
Esta pastelería ofrece todo tipo de panes y bollería hecha a diario. Destacan sus trenzas, que van desde el tamaño mini hasta el formato XXL.
Asimismo, una de sus novedades de cara a este verano es que se pueden adquirir unos bolos rellenos de heleado.
Larga trayectoria
Fundada por Ismael y Alfredo Sayalero, se trata de una de las pastelerías con más trayectoria de Euskadi. Tras años de formación y experiencia en hostelería, Ismael trabajó durante ocho años junto a Karlos Arguiñano, y posteriormente en la primera boutique panadera de Gipuzkoa, donde perfeccionó su técnica y visión del oficio.
Según señalan desde Guk Green, "fue en 1984 cuando abrió su primer obrador en Zarautz, justo debajo de la casa de su padre. La calidad de sus productos y la fidelidad de sus clientes hicieron crecer el proyecto, al que pronto se sumaron sus hermanos Alfredo, Maite y el resto de la familia. En 2022, Sayalero fue reconocida con el premio al mejor panettone tradicional de la península, un producto que hoy se puede adquirir durante todo el año en su pastelería. Y no te pierdas porque tienen 1 solete repsol y van camino de conseguir otro".
Un enfoque equilibrado
Aunque la bollería es calórica, no es necesario privarse de ella. La clave está en disfrutarla con mesura y en el contexto de una dieta sana y un estilo de vida activo.
Es importante recordar que no todo se reduce a contar calorías: los alimentos también son cultura, tradición y disfrute.
Si eres físicamente activo y mantienes un estilo de vida saludable, darte un capricho como un panettone o un bollo con helado no tendrá un impacto significativo. Además, siempre puedes optar por porciones más pequeñas o buscar alternativas menos calóricas, como con menos azúcar. En definitiva, el roscón de Reyes, como todo en la vida, se disfruta mejor con equilibrio y moderación.