La futura nueva Ley del Deporte continúa dando pasos hacia su definitiva aprobación tras recibir ayer el visto bueno de la Comisión de Cultura y Deporte del Congreso de los Diputados, donde los partidos políticos aprobaron dos de las enmiendas que más preocupaban a LaLiga y alejaron la posibilidad de un posible cierre patronal para este fin de semana en señal de protesta.

39 de los 42 clubes de Primera y Segunda División –todos excepto Athletic Club, Barcelona y Real Madrid–, entre los que están los guipuzcoanos Real Sociedad y Eibar, que forman parte de LaLiga ya habían expresado su temor antes de la retirada por parte del PP y del PSOE de unas enmiendas que afectaban directamente en su capacidad organizativa y en el ambiente planeaba incluso la amenaza del parón liguero.

Estas enmiendas se refieren al control por parte de la patronal de sus derechos para la explotación económica de la competición, lo que afectaba directamente al acuerdo firmado con el fondo de capital riesgo CVC plasmado en LaLiga Impulso y que está demandado en la justicia por Real Madrid, Barcelona y Athletic, y a la necesidad de que exista un informe vinculante y favorable ante cualquier intento de la Federación Española de Fútbol (RFEF) para modificar sus estatutos y reglamentos.

La superliga, sin oposición

Las dos enmiendas fueron aprobadas por los diputados del Congreso ayer por la tarde, en una larga sesión de más de cuatro horas de duración, pero, en cambio, no salió adelante la otra que preocupaba a la patronal y que era relativa al proyecto de la Superliga europea, que no tendría oposición en esta nueva legislación y en el que el Real Madrid, sobre todo en la figura de su presidente Florentino Pérez, y el Barcelona están trabajando desde hace tiempo.

Ahora, son los clubes profesionales los que deben decidir si toman alguna decisión al respecto en la Asamblea Extraordinaria que celebrarán mañana jueves, aunque parece que, de momento, la posibilidad de convocar un cierre patronal, tal y como confirmó a este periódico la propia Real Sociedad, ya no parece tan posible, aunque habrá que esperar al libro de ruta que escoja hoy mismo la comisión delegada antes de la asamblea de mañana y tras la que habrá una reunión entre los representantes de los 39 equipos disconformes con el articulado inicial del proyecto de ley.

La Ley del Deporte superó este trámite después de obtener 18 votos a favor, seis en contra y trece abstenciones, todas ellas del Partido Popular. Su siguiente paso será el de conseguir la aprobación del Congreso de los Diputados en el Pleno, que verá y votará en una próxima sesión el dictamen y las enmiendas al articulado no incorporadas en fase de ponencia y comisión y que los grupos parlamentarios decidan mantener vivas para someterlas de nuevo a debate y votación. En caso de ser aprobado, el proyecto de ley se remitirá al Senado, donde seguirá el procedimiento de debate en ponencia, comisión y Pleno. La Cámara Alta podrá aprobar el texto en sus términos, presentar enmiendas o proponer un veto. En el caso de los dos últimos supuestos, la iniciativa regresará al Congreso de los Diputados para la celebración de un último debate antes de su aprobación definitiva y publicación en el BOE, prevista para mediados del mes de diciembre.