Cero puntos, seis goles en contra y solo un disparo entre los tres palos en los dos partidos de Champions League que el Barcelona ha disputado hasta el momento. El Bayern de Múnich, un rival muy por encima de los culés, hizo lo que quiso en el Camp Nou. Pero es que el Benfica, un club que, sobre el papel, no se puede comparar con el club blaugrana, retrató a Ronald Koeman y a sus jugadores el miércoles. De madrugada, de vuelta de Lisboa a la ciudad condal, Joan Laporta tuvo que contar hasta diez para no actuar en caliente, ya que buena parte de su Junta le pide cuanto antes la cabeza del técnico neerlandés. Una destitución que por el momento no se va a producir. El entorno culé da por amortizado a un entrenador que nunca ha gustado al presidente y que desde hace tiempo ya no esconde las desavenencias con la directiva. El desenlace de este caso parece claro, aunque está por ver cómo y cuándo se produce la salida de Koeman.

Sin tiempo para que llegue un sustituto de consenso, el bueno de Ronald, salvo sorpresa mayúscula, dirigirá este sábado al Barça en el Wanda Metropolitano, donde le espera un Atlético de Madrid que le puede dar la puntilla. Luis Suárez o el propio Antoine Griezmann seguro que le tienen ganas. El técnico no podrá sentarse en el banquillo al estar sancionado y si la imagen no cambia, Laporta le podría fulminar durante el parón de selecciones, con más tiempo para que se produzca el relevo. Está por ver cómo soluciona el Barcelona el finiquito del neerlandés. Su despido le costaría 12 millones de euros y al nuevo inquilino del banquillo no se le podría ofrecer un gran contrato por las presiones del límite salarial. La economía de guerra que se ha instaurado en los despachos del Camp Nou afecta a todos los estamentos.

LOS CANDIDATOS

La prensa catalana ha intensificado el debate sobre quién es la persona idónea para ponerse al mando de la nave blaugrana. Y los nombres de los candidatos se suceden. El preferido por buena parte de la Junta Directiva y por los seguidores es Xavi Hernández. El exjugador del Barça, que fue el gran reclamo de la candidatura de Víctor Font en las pasadas elecciones, actualmente dirige al Al-Saad catarí y algunos dudan de que esté dispuesto a entrenar a un equipo en horas bajas.

Roberto Martínez, actual seleccionador de Bélgica, y Andrea Pirlo, sin equipo tras defraudar en la Juventus en su única experiencia como entrenador en la élite, son otros de los candidatos. El último en sonar como futurible es Marcelo Gallardo, que dirige a River Plate. Lo que parece claro es que Koeman sigue, de momento.