bilbao - Un golazo de Iñaki Williams y la gran actuación de Gorka Iraizoz entre palos castigaron ayer en San Mamés a un Rayo Vallecano que mereció la victoria, pero que fue víctima de un desacierto hasta increíble ante la meta rival.
El conjunto de Paco Jémez se fue de La Catedral en medio de una gran ovación de los aficionados locales y los que le han acompañado en el viaje a Bilbao, y también felicitado por su entrenador, pero con el zurrón de los puntos vacíos y seguro con el cabreo de haber desaprovechado una inmejorable ocasión para huir más lejos de un descenso que tiene a tres puntos.
Con mejor ánimo, aunque con cara de apuro, se fue a vestuarios un Athletic que lo pasó mal, pero que encontró en una conexión entre Raúl García e Iñaki Williams la ocasión para agarrar los importantes tres puntos en su pelea europea por eludir la séptima plaza y las previas del verano, en la que ahora aventaja en tres puntos al Sevilla.
Precisamente será el conjunto hispalense al que visitará este jueves en la vuelta de cuartos de final de la Liga Europa que encarará en desventaja (2-1).
Williams recibió de Raúl al borde del área, se revolvió ante su marcador y enganchó un violento disparo hacia la escuadra izquierda e incontestable para Juan Carlos. - Efe