Liga F: Varapalo en Zubieta

El equipo dirigido por Natalia Arroyo trató de dominar al Sevilla en los primeros compases del partido, mientras que las andaluzas lograron crear mucho peligro al contragolpe. Martín-Prieto estuvo cerca de anotar el primer gol para las visitantes, pero Elene Lete mantuvo la portería a cero con una gran intervención. La réplica realista llegó con un remate de Franssi tras un centro de Amaiur. La finlandesa, sin embargo, envió el balón por encima del larguero. Vanegas también pudo haber marcado de cabeza, pero el balón se marchó desviado.

El Sevilla, por el contrario, sí logró sacar partido a sus contragolpes. Unos minutos antes del descanso, Payne culminó uno de los ataques de las visitantes para subir el 0-1 al marcador.

El tanto sevillista fue un mazazo para las guipuzcoanas. Para colmo, poco después de reanudarse el encuentro, Payne marcó su segundo tanto tras una galopada desde el medio del campo que terminó con un remate cruzado dentro del área realista. El conjunto txuri-urdin no pudo reponerse. Como explicó la entrenadora realista, Natalia Arroyo, “se nos cae todo cuando el marcador se complica”. “Podíamos haber estado muchas horas jugando y no lo hubiéramos sacado”. Aún así, la Real no se rindió, y Amaiur estuvo cerca de recortar distancias para las guipuzcoanas. El conjunto txuri-urdin, no obstante, acusó la precipitación. En los minutos finales, el Sevilla sentenció el encuentro con una vaselina de Inma Gabarro. 

La Real, que se sitúa en la séptima plaza, cerró un intenso primer tramo de partidos de este 2023 con una amarga derrota, tanto por el marcador encajado como por la imagen ofrecida. El conjunto txuri-urdin tratará de recuperar los ánimos y las fuerzas en el parón de tres semanas que viene ahora, antes de recibir al Atlético el próximo 4 de marzo. 

Arroyo: "Es una derrota dura"

Natalia Arroyo reconoció que el resultado ante el Sevilla supuso “una derrota dura”. La entrenadora realista lamentó que, con el 0-0, sus jugadoras tuvieron ocasiones “que hubieran podido escribir otro partido”. “Las jugadoras lo intentan, pero estamos con esa falta de energía que hace que el partido se nos haga una montaña. Podíamos haber estado muchas horas jugando y no lo hubiéramos sacado. Nos van a venir bien estas semanas de parón. No estamos encontrando la manera de competir lo suficientemente bien como para puntuar y se nos cae todo cuando el marcador se complica”.