os avances tecnológicos han sido de gran ayuda para crear nuevas formas de ahorro energético. La aerotermia es una de ellas, ya que es la tecnología que aprovecha la energía del aire para crear un sistema de calefacción o refrigeración. El funcionamiento de este sistema se basa en las bombas de calor, es decir, utiliza como base la energía del aire para climatizar diferentes espacios. Además, se considera una fuente energética muy eficiente y limpia.

Llegados a este punto, es normal preguntarse ¿cómo es posible obtener calor del aire en invierno? Lo cierto es que es posible, ya que el aire, incluso a bajas temperaturas, contiene energía que es absorbida por el refrigerante que circula por el circuito entre la unidad exterior e interior.

La unidad exterior hace la función de evaporador (cede frío al ambiente) en invierno; la unidad interior, hace la función de condensador, cediendo el calor al agua del circuito de calefacción y agua caliente sanitaria.

Para entender mejor el funcionamiento de este sistema, la tecnología extrae la energía del aire a través de un sistema de bombas. Estas pueden extraer hasta un 75% de energía del aire que se encuentra e la propia atmósfera y así, se reduce el uso de la electricidad para el equipo, utilizando solo el 25%.

Los equipos de la aerotermia funcionan al igual que una bomba de calor estándar, pero ofrecen tres opciones distintas en una misma instalación: calefacción en invierno, refrigeración en verano y agua caliente durante todo el año.

VENTAJAS Y DESVENTAJAS

A la hora de adquirir un nuevo sistema como este en nuestro hogar, es preciso estar atento a todos los detalles y no dejarnos llevar por las palabras bonitas del fabricante, ni tampoco obcecarnos con lo negativo y no darle el valor que merece a esta nueva tecnología.

Según los expertos y fabricantes de los equipos, el rendimiento de la aerotermia es de un 400%, es decir, que por 4 kW producidos solo se paga 1 kW y 3 kW son gratuitos. Esto se debe a que hay una recuperación de energía gratuita, la contenida en el aire exterior. Aún así sigue necesitando energía eléctrica, que es más cara que el gas natural u otros sistemas, pero al tener tan bajo el nivel de consumo, sale rentable.

SENCILLA INSTALACIÓN

Otro de sus puntos positivos es su instalación, muy sencilla, y el mantenimiento es mínimo. Es muy limpia y depende de una única fuente energética y proveedor.

Sus pocas desventajas se resumen en el impacto visual, ya que es necesario instalar una bomba aerotérmica exterior y por otra parte, el gasto inicial es elevado, una inversión importante que se recupera en una media de 3 a 5 años, aunque a la larga sale rentable.