Los 88 municipios que conforman el territorio histórico de Gipuzkoa comienzan una nueva etapa. Cumplida la renovación de las alcaldías tras las elecciones del 28 de mayo, ayer arrancó el décimo mandato de la democracia en el ámbito municipal, donde los ayuntamientos vuelven a reivindicarse como la institución con la ventanilla más cercana a la sociedad que dirigen. Y de ellos dependerá en buena medida el desarrollo de proyectos estratégicos pendientes de impulsarse durante los próximos cuatro años a lo largo y ancho del territorio guipuzcoano. Así sucede, por ejemplo, en Donostia, donde Eneko Goia renueva la Alcaldía y desde ayer afronta su tercer mandato, de nuevo junto a sus socios del PSE aunque sin que se conozcan aún las tareas que tendrá asignadas cada formación. El primer edil jeltzale prometió ayer “trabajar duro para devolver la confianza a los donostiarras” en cuatro años en los que se presume que se definirá la renovación urbanística en la que está enfrascada la ciudad. Las obras del Topo, la nueva estación del Tren de Alta Velocidad, el futuro barrio que nacerá en los terrenos que ocupan los cuarteles de Loiola y la consolidación de espacios empresariales como Miramon y Eskusaitzeta son algunos de los retos que encara el nuevo Ayuntamiento, junto a otras cuestiones siempre de actualidad como los cambios en el tráfico o el problema en el acceso a la vivienda, en especial para los jóvenes. La nueva etapa que arrancó ayer en Gipuzkoa supone también un cambio en la geografía del poder municipal derivada de los resultados que emanaron de las urnas hace tres semanas. EH Bildu, que ya dominaba buena parte de los ayuntamientos, gobierna en 51 de los 88 municipios y recupera plazas importantes como Arrasate y Tolosa en detrimento del PNV, y Pasaia y Andoain, hasta ahora en manos del PSE. Los jeltzales pierden terreno aunque conservan diez alcaldías y en algún caso, como Deba, recuperan el bastón de mando 40 años después, y el PSE gobierna en cinco. Una vez consolidadas las nuevas estructuras de los 88 municipios, la mirada se fija ahora en la fecha para la constitución de la Diputación foral del territorio. Entonces quedará, sí, completa la fotografía tomada el pasado 28 de mayo a través de las urnas.
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