El SMI vasco se enquista. Si ayer el Gobierno vasco emitía un criterio negativo a la tramitación parlamentaria de la ILP impulsada por ELA y LAB, esta mañana Confebask ha ratificado su rechazo a negociar un salario mínimo con los sindicatos. Así, ante la tercera negativa por parte de la patronal, las centrales abertzales han anunciado movilizaciones y que en las próximas semanas presentarán una demanda ante el Tribunal Superior de Justicia del País Vasco.

"Vamos a demandar a Confebask y vamos a movilizar a los trabajadores y a las trabajadoras por algo que tenemos claro: si no es ahora, en un futuro vamos a tener una salario mínimo acorde a las necesidades de los trabajadores y las trabajadoras de la Comunidad Autónoma Vasca", ha informado Pello Igeregi, responsable de negociación colectiva de ELA, al salir de la reunión en el Consejo de Relaciones Laborales (CRL).

En sus explicaciones, la patronal apela a que esta cuestión no tiene encaje legal al ser competencia exclusiva del Estado. "No ha cambiado nada desde el último emplazamiento y, por lo tanto, sigue sin poder exigirse a Confebask negociar lo que legalmente no le está permitido: la parte sindical pretende un objeto jurídicamente imposible, al ser ésta una materia de competencia exclusiva del Estado", explica en una comunicación conjunta con sus organizaciones miembro (Adegi, Cebek y SEA).

La patronal insiste en abordar este debate en la Mesa de Diálogo Social, en la que participa junto al Gobierno vaso y los sindicatos UGT-Euskadi y CCOO. En este foro no están, en cambio, ELA y LAB. "La pretensión sindical de forzar un debate exclusivamente con los temas y en el foro que ellas determinen, sin ningún margen de flexibilidad, deja patente quién quiere dialogar y quién persigue únicamente imponer su criterio y su agenda en un asunto que, como decíamos, no está a nuestro alcance y es, asimismo, mucho más transversal y con consecuencias mucho más profundas de lo que pretenden", defiende.

Dos vías

Con lo ocurrido esta mañana en la sede del CRL de Bilbao, a los sindicatos se les complican las dos vías que habían abierto para conseguir un salario mínimo propio para Euskadi: por un lado, la legislativa, a través de una Iniciativa Legislativa Popular (ILP) que pretende que el Parlamento Vasco impulse en Madrid la reforma del Estatuto de los Trabajadores, para que las comunidades autónomas puedan establecer su propio SMI. Y, por otro, el nuevo portazo de la patronal a establecer una mesa de negociación. "Aquí lo que vemos es que utilizan argumentos jurídicos para defender posiciones muy políticas. Con el Gobierno vasco pasa lo mismo, bloquean las dos vías pasándose la pelota unos a otros y el resultado es que la clase trabajadora se queda sin salario mínimo", ha denunciado Oihana Lopetegi, responsable de acción sindical de LAB.

Sobre la primera vía, teniendo en cuenta que PNV y PSE se oponen a la tramitación de la ILP, el resultado parece más que claro. A pesar de ello, ELA y LAB siguen llamando a los partidos políticos a dar luz verde a su toma en consideración en el pleno del Parlamento. En cuanto a la segunda, los sindicatos abertzales ya habían anunciado que acudirían a los tribunales y es lo que van a hacer en las próximas semanas, tal y como han confirmado este miércoles.

A la reunión también han acudido UGT-Euskadi y CCOO, que defienden la negociación de un salario mínimo de convenio. A su salida de la reunión, Juanjo López, responsable de Acción Sindical de CCOO en Euskadi, ha considerado "endebles" los argumentos empleados por la patronal. "Lo que nos dice es que quedaría una vía abierta, que es la vía del diálogo social, pero en esta vía no habría competencias para acordar contenidos concretos como un Salario Mínimo Interprofesional. El foro de negociación de un salario mínimo sería aquí. Para nosotros, la vía sería el salario mínimo de negociación colectiva que es perfectamente legal y que se podría abrir mañana mismos", ha señalado.

Un matiz que aporta la diferencia con las pretensiones de ELA y LAB, que apuestan por el establecimiento de un SMI "para todos los trabajadores". "Precisamente, quienes más lo necesitan son quienes están sin convenio o los que dependen de convenios estatales", ha defendido Igeregi.