Gasteiz – Las diecisiete empresas vascas que cotizan en Bolsa han disfrutado de un año 2023 diverso, con ganancias de valor en 11 de ellas, sobre todo en las dos fabricantes alaveses de tubos y el BBVA, y pérdidas en otras seis, en firmas más pequeñas.

El anterior, 2022, fue un año duro, con solo cuatro en verde: las dos grandes, BBVA e Iberdrola, más Tubacex y Faes Farma, unos resultados acordes con el mal año bursátil 2022, en el que el índice selectivo Ibex-35 bajó un 5,56%.

En cambio, el 2023 ha sido un año que ha sobrepasado las expectativas, con una revalorización del Ibex del 22,76%, hasta los 10.102 puntos en el cierre del pasado viernes. Una base sólida para arrancar el próximo día dos la nueva temporada bursátil.

Las dos grandes compañías vascas, BBVA e Iberdrola, las únicas que cotizan en el Ibex-35, han terminado el 2023 muy bien, e incluso con alardes en el caso del banco, que ha ganado el 46%, hasta acabar a 8,22 euros la acción, impulsado por la subida de tipos y los brillantes beneficios declarados, según datos recabados por Efe para esta información.

La otra grande, también con beneficios récord, Iberdrola, ha ganado un 8,6 por ciento, hasta los 11,87 euros la acción.

Pero los triunfadores del año han sido las dos tuberas, sobre todo, Tubos Reunidos, que ha subido un 162,2%, hasta 0,64 euros por acción. Es cierto que venía de muy abajo, pero se ven los frutos de la reordenación de la compañía en 2021 con una inyección pública de 112 millones.

Tubacex también se ha disparado un 75,1 %, hasta los 3,50 euros, y eso que venía de un 2022 en el que ya había subido un 33 por ciento, tras consolidar los beneficios netos y al calor de los nuevos contratos de venta de tubos, con una cartera de pedidos récord.

Revalorización generalizada

Muy bien le ha ido a la papelera guipuzcoana Iberpapel, que ha ganado un 37,9 por ciento, hasta 18 euros la acción. Otra que ha crecido mucho gracias a su cartera de pedidos ha sido la ferroviaria beasaindarra CAF, que ha ganado un 23 por ciento, subiendo a 32,60 euros.

Una revalorización parecida, del 22,4%, ha logrado el fabricante de vidrios alavés Vidrala, que ha elevado a 93,80 el precio de la acción.

En el sector de la automoción, lastrado por las dudas en las ventas de coches nuevos, ha habido una de cal, para CIE Automotive, que ha subido un 6,90% hasta los 25,72 euros, y otra de arena, para Gestamp, que ha bajado el 2,9% hasta 3,50 euros la acción.

La inmobiliaria vizcaina Neinor Homes ha subido un 35,6 por ciento, hasta 10,56 euros la acción, gracias al aumento de promociones.

Dentro de las compañías del mercado continuo, la tecnológica Dominion ha perdido un 6,28%, hasta los 3,36 euros por acción, y la farmacéutica Faes Farma ha bajado un 9,97% en la acción (a 3,16 euros), tras el vencimiento de la patente de la bilastina.

Las cuatro últimas son firmas pequeñas que cotizan en el BME Growth, algunas con poco movimiento bursátil. Arteche la empresa vizcaina dedicada a equipos del sector eléctrico, ha terminado el año justo en los 4 euros, con una ganancia del 2,56 % anual.NBI Bearing, alavesa dedicada a los rodamientos, ha ganado este año un 8,2%, hasta los 4,98 euros.

En cambio, Aeternal Mentis, una compañía de infraestructuras tecnológicas e inteligencia artificial situada en Bilbao, ha cerrado a 9,30 euros con una bajada del 1,59% anual. Indexa, financiera, que entró en julio en el BME Growht, ha perdido este año un 3,40%, hasta 9,95 euros.

Mención aparte merece Siemens Gamesa, otra de las grandes firmas vascas, porque este año ha dejado de cotizar. La matriz Siemens optó por presentar una OPE a 18 euros para excluirla de bolsa tras arrastrar fuertes pérdidas. Desde entonces, cotiza dentro del grupo Siemens Energy, que ha perdido este curso un 31,72% de su valor bursátil.

El Post-it

Empuje de la construcción. Las siete grandes constructoras del Estado cotizadas en Bolsa avanzaron a lo largo del año 2023 más de un 27% en su capitalización bursátil, en un año marcado por el incremento de los precios de los materiales y el empuje de los fondos europeos dedicados a las infraestructuras, que impulsaron sus beneficios a doble dígito. La suma de la capitalización de ACS, Ferrovial, Acciona, Sacyr, FCC, OHLA y San José a cierre del año alcanzaba los 51.886 millones de euros.