En los últimos años, la innovación se ha convertido en una importante variable empresarial estratégica. Aunque las empresas son conscientes de la necesidad de innovar, muchas de ellas encuentran grandes barreras en el desarrollo de este tipo de actividades. Esta situación se agrava aún más en el caso de las pequeñas y medianas empresas (pymes), donde la tecnología se ha convertido en un criterio diferenciador clave en la competitividad y en el futuro éxito para muchas organizaciones. 

Así, la adopción de los avances tecnológicos juega un papel fundamental para garantizar que las pequeñas y medianas empresas respondan positivamente al ritmo del mercado y puedan adoptar enfoques más innovadores y diferenciadores dentro del entorno en el que se desenvuelven. 

En este contexto, desde 2019, la alianza Basque Research & Technology Alliance (BRTA) tiene como objetivo generar conocimiento desde la ciencia y la tecnología y transferirlo a la industria y a las empresas vascas con el fin de reforzar la economía vasca.

Contribuir a mejorar la competitividad de las empresas y lograr una sociedad más innovadora es la gran meta de BRTA, desde la coordinación y la suma de capacidades de sus socios. Los centros que conforman la alianza colaboran con las empresas, ofreciéndoles el conocimiento en forma de soluciones científico-tecnológicas para que éstas puedan hacer frente a los retos del mercado. A partir del nuevo conocimiento generado a través de la investigación y el desarrollo de nuevas tecnologías, la innovación pasa por aplicar estos avances a los productos, a los procesos o a los servicios de las empresas. En definitiva, se trata de llevar a la práctica las soluciones novedosas y que generen un beneficio a la sociedad.

Apoyo a la pequeña y mediana empresa

Uno de los objetivos que se ha fijado para este año la alianza BRTA es acercar la innovación en producto y proceso a las pequeñas y medianas empresas vascas y dar a conocer la oferta de servicios que proporcionan los centros que forman la alianza. Se quiere llegar también a las pequeñas y medianas empresas que no están familiarizadas con la innovación, y para ello es fundamental que estas organizaciones conozcan cómo acceder a procesos de innovación. Y es que la alianza BRTA contribuye a orientar a las empresas a los centros idóneos para cada caso, centros que tienen muy interiorizado que deben aportar soluciones a las empresas, poniéndose en su lugar y entendiendo sus problemas.

Uno de los objetivos fijados por BRTA para este año es acercar la innovación en producto y proceso a las pymes

En muchas ocasiones, se tiende a pensar que la adopción de nuevas tecnologías les queda grande a las pequeñas y medianas empresas. Es por ello que la alianza BRTA quiere hacer hincapié en que eso no es así: la capacidad de una empresa no la define el tamaño, sino su visión innovadora. Innovar es cuestión de carácter, no de tamaño.

BRTA cuenta con más de 4.000 profesionales en los 17 centros tecnológicos y de investigación cooperativa que forman la alianza, que trabajan en diversos campos para dar respuesta a las necesidades de la sociedad y las empresas desde la investigación y la tecnología, generando nuevo conocimiento y transfiriéndolo.

BRTA, una alianza para generar conocimiento

La alianza BRTA está compuesta por 13 centros tecnológicos y 4 centros de investigación cooperativa (Azterlan, Azti, Ceit, CIC bioGUNE, CIC biomaGUNE, CIC energiGUNE, CIC nanoGUNE, Cidetec, Gaiker, Ideko, Ikerlan, Leartiker, Lortek, Neiker, Tecnalia, Tekniker y Vicomtech), junto al Gobierno Vasco, SPRI y las Diputaciones Forales de Araba, Bizkaia y Gipuzkoa. El consorcio se creó en 2019 con el fin de generar conocimiento puntero, desde la investigación y el desarrollo de tecnología, y transferirlo a la industria y la empresa, con el objetivo de reforzar la economía vasca. Junto con este objetivo, BRTA también apuesta por internacionalizar la oferta científico-tecnológica vasca y posicionarla a nivel europeo y global. 

El principal foco de actividad de los centros es proporcionar soluciones basadas en la investigación y la tecnología en ámbitos que son relevantes para el país; por ejemplo, en el sector de la fabricación, con nuevos desarrollos de máquinas o procesos como la fabricación aditiva, o en inteligencia artificial para aplicaciones industriales; en el sector de la energía, abordando cuestiones como la generación de energía renovable, la electrificación del sistema energético, las nuevas baterías o el hidrógeno; en el campo de la salud personalizada, en lo relativo a la prevención, el diagnóstico y la terapia; o en otros ámbitos como el de la industria alimentaria, la ecoinnovación, la nueva movilidad, las tecnologías digitales… Eso sí, siempre innovando y aportando soluciones a la industria.