Los salarios de los trabajadores vascos se incrementan, pero menos que los del resto de comunidades. Y esos aumentos no logran corregir una sensible pérdida de poder adquisitivo desde el año 2019. Son las dos grandes conclusiones que arroja el IX Monitor de Salarios de Adecco Group Institute, que recoge el fuerte impacto de la inflación registrada a lo largo del pasado año.

El informe del centro de estudios de la compañía de recursos humanos, que toma datos del INE, muestra como el salario medio en Euskadi fue el año pasado de 2.099 euros, el segundo más alto del Estado después de Madrid (2.139 euros). No obstante, con respecto a 2021, la subida fue del 2,4%, mientras que la media del Estado fue del 4%. Además, ese incremento fue el segundo menor, solo por detrás de Asturias (1,4%) y lejos de los anotados en comunidades con similar estructura productiva, como Navarra (4,6%), Cantabria (4,5%), Galicia (3,2%) y Catalunya (4,7%). Lógicamente, allí donde más altos ya eran los salarios el margen de las remuneraciones para crecer ha sido menor, pero Madrid sí elevó su salario en un apreciable 3%, confirmando así su despegue de los últimos años, beneficiada en su caso por el empuje que la capitalidad brinda a su economía. 

En 2022 el salario medio en España se ubicó en los 1.822 euros brutos al año, lo que supuso un aumento del 4%, la segunda mayor subida desde el año 2008, cuando apenas se vislumbraban los efectos venideros de la Gran Recesión. Sin embargo, ese aumento no logró compensar el que trajo consigo la inflación media, que fue del 8,4%, la más alta en 35 años. En la comparativa resultante de la evolución entre los años 2017 y 2022, el salario medio perdió una capacidad de compra en Euskadi del 4,7%, un descenso que solo fue superado por el de Castilla y León (-4,9), La Rioja (-5,2%), Asturias (-5,6%), Cantabria (-5,9%) y Castilla-La Mancha (-6,1%). La comunidad que, en ese quinquenio, ha perdido menos poder adquisitivo, según el informe de Addeco, es Catalunya, con una caída del 0,4%. La media del Estado atendió a un descenso del 2,5%. En términos de euros corrientes, esta pérdida es equivalente a 95 euros mensuales menos en la CAV frente a 44 euros menos para el conjunto del Estado. De esta forma, para que la remuneración media en Euskadi recuperara el poder de compra que tuvo en 2017 debería incrementarse en 95 euros por mes (1.138 euros anuales). No obstante, como analiza el informe, “un salario más elevado no corresponde necesariamente con una mejor evolución en la capacidad de compra. Por ejemplo, Madrid, que tuvo el salario más alto en 2022, disminuyó un 2,1% su capacidad de compra en el periodo 2017-2022, mientras que Comunidad Valenciana, con un salario 28% inferior al de Madrid, se vio menos afectada al reducir su capacidad de compra un 1,4%”. 

El año 2019 supone un importante cambio de referencia en las variaciones salariales. Ese año, mientras a nivel estatal la subida media fue del 2,2%, en Euskadi se quedó en apenas el 1%. Al año siguiente, con la irrupción de la pandemia, la caída de los salarios de los trabajadores vascos fue menos acusada (-1,6%) que en el conjunto del Estado (-3%), pero la recuperación posterior también ha sido más débil -5,1% y 2,4% frente al 6,6% y 4%-, si bien en este aspecto desempeña un papel decisivo la recuperación del turismo, que propició recuperaciones salariales en las comunidades en las que este sector, junto con los servicios en general, representa un mayor peso, como Canarias, Baleares, Comunidad Valenciana, Catalunya y Andalucía. Los salarios medios de Madrid y Euskadi superan en 5.400 euros anuales o más la remuneración promedio de otras siete comunidades: Extremadura (1.487 euros al mes), Canarias (1.568 euros), Murcia (1.581 euros), Castilla y León (1.621 euros), Andalucía (1.624 euros), Castilla La Mancha (también 1.625 euros) y La Rioja (1.648 euros).

El informe de Adecco Group Institute también recoge la comparación del salario medio español con el resto de países de la Unión Europea. “En 2022, el salario medio ordinario bruto de los 27 países de la Unión Europea fue de 2.302 euros mensuales de promedio. Así, la remuneración media española resulta un 20,9% más baja. En términos absolutos, la diferencia es de 480 euros mensuales (5.760 euros por año)”, proclama el documento elaborado por el servicio de estudios de la firma de recursos humanos. En este aspecto, España se sitúa en una posición “intermedia” dentro de los Veintisiete: hay 15 países europeos cuyos salarios promedios son inferiores al de España, mientras que los restantes 11 tienen remuneraciones mayores que la española. A la cabeza figuran Luxemburgo (3.713 euros al mes), Dinamarca (3.573 euros) Alemania (3.148 euros), Irlanda (3.051 euros), Bélgica (3.007 euros), Países Bajos (2.964 euros), Austria (2.964 euros), Finlandia (2.678 euros) y Suecia (2.604 euros). “Un asalariado medio español necesita trabajar casi 21 meses para tener un ingreso similar al que tiene un asalariado medio alemán en un año”, subraya el informe. 

El castigo de la inflación en el apartado salarial fue especialmente notorio el pasado año en todos los sectores. En lo que va de 2023, no obstante, las perspectivas parecen mejorar, con una tenue mejora salarial y una inflación que, aunque a lento ritmo, parece encauzarse hacia niveles más controlables.