La reforma laboral aprobada a finales de 2021 originó una modificación que significó la desaparición de los contratos por obra, que a partir de abril del año siguiente se convirtieron en fijos discontinuos, con mayores ventajas. Los efectos sobre el mercado laboral tardaron en conocerse, porque los datos ofrecidos desde el Ministerio de Trabajo y Economía Social no hacían la distinción y remitían al conjunto de indefinidos, pero a comienzos de marzo comenzaron a definirse los resultados. En Euskadi, el Departamento vasco de Trabajo y Empleo ha facilitado este mes la información de la que dispone Lanbide que refleja el fuerte ascenso de esta modalidad de contratación.

En Gipuzkoa, las personas fijas discontinuas que aparecen registradas en el Servicio vasco de Empleo en marzo de este año ascienden a 7.371, lo que representa un fuerte crecimiento del 38,5% con respecto a abril de 2022, mes en el que entró en vigor la reforma laboral y en el que existía en el territorio un total de 4.528 fijos discontinuos demandantes en Lanbide. Estos datos se recogen en la respuesta que la consejera vasca de Trabajo y Empleo, Idoia Mendia, traslada a la pregunta formulada por la parlamentaria vasca del grupo mixto Vox Amaia Martínez.

La cifra de fijos discontinuos sin ocupación en marzo crece un 53% respecto a abril del año pasado

La evolución del número de personas fijas discontinuas que están ocupadas en territorio guipuzcoano y las que figuran como no ocupadas es también al alza, aunque el crecimiento se acentúa más en este último caso. El pasado marzo, según los últimos datos disponibles, el Servicio vasco de Empleo contabilizaba 5.529 fijos discontinuos que estaban trabajando mientras que un año antes esta cifra era de 3.676, con una diferencia positiva del 33,5%.

En el caso de las personas integradas en esta modalidad contractual que no tenían una ocupación, en marzo de 2023 figuraban 1.842 frente a las 852 de abril del año pasado, lo que significa incrementar este número en un 53,7%. No obstante, se trata de una foto fija en un momento del año determinado que hay que medir con cautela, puesto que la naturaleza de este contrato lleva intrínseca la variabilidad y fijos discontinuos que trabajan, por ejemplo, en febrero, pueden figurar como no ocupados dos meses después.

COLECTIVO FEMENINO

En los sucesivos datos que diferentes instituciones ofrecen de manera periódica acerca de la evolución del paro y de la ocupación en Gipuzkoa queda reflejada una mayor vulnerabilidad del colectivo femenino que, en este caso también se reitera. Así, el número de mujeres que tiene un contrato fijo discontinuo duplica al de hombres

Según los datos aportados por el Departamento vasco de Trabajo y Empleo, en marzo del presente ejercicio un total de 3.052 de demandantes eran mujeres fijas discontinuas frente a los 1.476 hombres. Sin embargo, la proporción entre las personas con este tipo de contrato que están ocupadas y las que no tienen ocupación es similar en los casos femenino y masculino.

Entre las mujeres, 2.563 de las que declaran tener un contrato fijo discontinuo se encontraban desempeñando un trabajo en ese mismo mes, mientras que la situación de las 489 restantes en ese momento era de paro. En el caso de los varones, eran 1.113 los que estaban ocupados y 363 carecían de un trabajo en el momento de la consulta.

El sector de la hostelería emplea con frecuencia el modelo fijo discontinuo. David Zorraquino / Europa Press

La situación de las personas fijas discontinuas en Gipuzkoa está, a rasgos generales, alineada con la que se vive en la CAV, aunque lógicamente en este último caso con números más abultados. Los datos apuntan a que marzo de 2023 se cerró con 23.806 demandantes de empleo registrados en Lanbide clasificados como fijos discontinuos, de los que 17.361 se consideran ocupados y 6.175 en periodo de inactividad.

Un 31% del total de fijos discontinuos de la CAV residen en Gipuzkoa

La evolución que ha experimentado esta modalidad contractual en el último año, entre marzo de 2022 y marzo de 2023, apunta a que este colectivo ha crecido en la demanda de empleo “de manera significativa”, tal y como se recoge en la respuesta del Ejecutivo vasco. 

En estos meses la cifra ha crecido en 10.944 personas, de las que 3.515 corresponden al grupo de los fijos discontinuos en periodo de inactividad, lo que representa el 25,9% del conjunto de demandantes de empleo registrados en Lanbide que tienen esta modalidad de contrato. Si bien es cierto que esta presencia ha ganado 5,2 puntos, si se compara con el mes de marzo de 2022, la diferencia revierte con respecto a diciembre de 2021, cuando había seis décimas más de fijos discontinuos sin ocupación. Quienes sí la tienen integran un colectivo de 7.429 personas.

Distribución

Te puede interesar:

Al margen de los datos referidos a Gipuzkoa, Lanbide tiene información acerca de cómo se distribuyen los fijos discontinuos en los tres territorios donde el guipuzcoano queda en el término medio. Del total de demandantes de empleo registrados que se definen como fijos discontinuos, el 16,3% pertenece a Álava, el 31% a Gipuzkoa y el 52,7% a Bizkaia. Se observa así una proporcionalidad en función de la población de cada territorio.

Las diferencias, aunque leves, se encuentran en los fijos discontinuos que declararon en marzo de este año estar en periodo de inactividad, puesto que se observa una uniformidad entre los tres territorios. Así, el Departamento vasco de Trabajo y Empleo fija en un 28,9% el porcentaje de este colectivo dentro del total de fijos discontinuos en el caso de Álava, que es algo superior al resto de la CAV. En Gipuzkoa uno de cada cuatro estaban inactivos, y en Bizkaia el porcentaje es seis décimas superior, un 25,6%.