El creciente nivel tecnológico de las empresas junto con el cambio generacional provoca una enorme demanda de perfiles profesionales con mayor formación académica. Esta demanda es particularmente intensa en el ámbito de la ingeniería. Según el último Informe de necesidades de empleo y perfiles profesionales de Gipuzkoa publicado por Adegi, entre los perfiles de formación universitaria, la Ingeniería Industrial tiene un papel preponderante. Si en 2020 un 24,7% de los perfiles universitarios correspondían a estudios de Ingeniería Industrial, en 2022 crece casi un 50% el volumen de la contratación para los estudios universitarios, y los perfiles de Ingeniería Industrial se mantienen como los más contratados, con un porcentaje del 27,7%.

Gipuzkoa es un territorio con un marcado PIB industrial, con empresas tractoras que todos conocemos, y también con muchas empresas de tamaño mediano líderes a nivel mundial en distintos nichos de mercado. El futuro de todas ellas está ligado en gran medida a nuestra capacidad como sociedad para atraer vocaciones a titulaciones del ámbito de la ingeniería. Y ello con especial atención a las alumnas, cuya presencia en estos estudios está en el entorno de 25% del alumnado total.  

ETAPAS FORMATIVAS INICIALES

En la Escuela de Ingeniería de Gipuzkoa somos conscientes de que estas vocaciones deben impulsarse no ya desde el bachiller, sino en etapas formativas previas. Así ponemos en marcha actividades prácticas, campus de verano, ferias de orientación, visitamos centros y participamos activamente en la Zientzia Astea, con el objetivo de que estudiantes de secundaria conozcan las posibilidades que brinda la ingeniería para resolver problemas de actualidad.

Mediante estas acciones hemos logrado reforzar nuestra matrícula, pero no nos conformamos. Para nosotros son claves las colaboraciones estrechas con empresas y grupos como, por ejemplo, Ulma, que con su compromiso en la formación de nuestros estudiantes ayuda a fomentar los estudios de ingeniería en nuestro territorio.