La vicepresidenta para la Transición Ecológica y Reto Demográfico, Teresa Ribera, recibió ayer a los grupos parlamentarios para la elaboración del plan de contingencia que tiene que preparar España ante la amenaza de un posible corte en el suministro de gas por parte de Rusia.

El citado plan de contingencia va dirigido a reforzar el nivel de almacenamiento, un uso más eficiente de la energía y la sustitución del gas por otros combustibles. Los representantes del sector energético trasladaron sus propuestas en tres áreas concretas para trazar ese plan: ahorro y eficiencia energética, aceleración al máximo de sustitución del gas a través de la electrificación y solidaridad con otros países europeos.

También se pidió la opinión de los diferentes sectores respecto a un orden para considerar a aquellos consumidores que podrían ser llamados prioritarios en el caso necesario de mantenimiento del suministro, como hospitales, servicios de asistencia, industrias esenciales, etc.

En el caso del sector eléctrico, recordaron que han aportado y seguirán haciéndolo iniciativas de ahorro y eficiencia energética y destacaron su contribución a la descarbonización de la economía con importantes inversiones que permiten al país avanzar en la independencia energética.

Mañana se sabrá si los rusos deciden restablecer el paso de gas a Alemania por el gasoducto Nord Stream 1 y el 26 de julio está prevista una reunión de los mandatarios de la Unión Europea con el fin de consensuar una estrategia común basándose en los planes de contingencia que cada país miembro debe entregar la próxima semana.