Una señal poco visible, un desprendimiento del terreno, una cuneta en mal estado… Todos estos factores y muchos otros pueden provocar accidentes de tráfico. Tal y como muestra el estudio de evaluación de carreteras EuroRAP, que analiza el riesgo de las carreteras europeas, el buen estado de conservación tiene un papel vital en la reducción de la siniestralidad. Y esa es la misión de Serveo, empresa responsable de la ejecución de operaciones de conservación y explotación de la Red Secundaria de la zona de Ekialdea. Un equipo de una treintena de personas se ocupa de conservar y mantener en perfecto estado de revista 50 km de vías ciclistas y los 500 kilómetros de carreteras de un sector que comprende, entre otras, la GI-2132 (de la N-I a la GI-636 por Errekalde y Astigarraga; la GI-2134 (de Oiartzun a Irun); la GI-2631 (de Villabona al alto de Orio por Asteasu y Aia); la GI-2638 (de Rentería al alto de Gaintxurizketa por Lezo); la GI-2120 (de Estella a Beasain); la GI-3440 (de Lezo a Hondarribia por el alto de Jaizkibel); o la GI-3401 (subida hospitales). “La seguridad vial es uno de los objetivos de nuestro trabajo, el segundo sería la propia vialidad de la carretera, es decir, que esté en uso el cien por cien del tiempo”, afirma Manuel de Francisco Peláez, director de Transporte en Serveo.

Equipos especializados 

La labor de este equipo –que incluye desde ingenieros y personal técnico, a operarios y administrativos– implica una función primordial de vigilancia permanente que se realiza 365 días al año y 24 horas al día. Eso implica atención de accidentes o desprendimientos de taludes, detección de baches o de objetos en la carretera… Además hay una labor de reparación del firme, el mantenimiento de la señalización horizontal y vertical, iluminación, elementos de drenaje y cunetas que tienen que estar en perfectas condiciones para que no se produzcan inundaciones. El clima lluvioso es una de las particularidades de este territorio, pero también su orografía montañosa y las características de la vegetación imponen tareas extra. “Tenemos equipos especializados en tala y poda que son imprescindibles por la envergadura de los árboles y la densidad de la vegetación. En una zona montañosa y lluviosa hay que estar también muy pendiente de los posibles desprendimientos y del drenaje de las cunetas. Todas esas atenciones tienen que ser urgentes, hay que enviar medios y equipos de manera ágil. Además, el hecho de ser carreteras muy sinuosas, sin arcenes en muchos casos y con mucho tráfico añade más complejidad a este tipo de trabajos que implican corte de carril”, explica Manuel de Francisco.

Equipos especializados en tala y poda de árboles. Serveo

Por otra parte, en invierno, el protocolo establece trabajos preventivos. Cuando la temperatura baja de los 2 grados, se ponen en marcha los 7 camiones quitanieves de los que disponen para echar sal o salmuera a las vías y evitar que se generen placas de hielo. En los días de nieve, se llevan a cabo trabajos curativos para retirarla de la calzada y permitir que se pueda seguir circulando de la manera más segura posible.

Asumiendo retos: tecnología y medioambiente

En relación con el clima y el entorno natural, la conservación de carreteras tiene un papel relevante en el cumplimiento de los objetivos de la Unión Europea contra el cambio climático, especialmente en lo que tiene que ver con las emisiones de gases de efecto invernadero del transporte. Numerosos estudios avalan el impacto que tiene una adecuada conservación de la infraestructuras en la reducción de emisiones de CO2 de los vehículos. Por eso, tal y como expone De Francisco, las labores de mantenimiento no sólo deben velar por preservar los ecosistemas naturales de la zona, sino que también se debe impulsar el desarrollo de infraestructuras sostenibles, alargando su vida útil, utilizando para ello materiales más sostenibles y facilitando el uso de vehículos cero emisiones mediante la apuesta por las energías renovables. “Desde Serveo, estamos impulsando actividades con impacto positivo en el medioambiente, como la conservación de carreteras, la movilidad sostenible, las infraestructuras para carga eléctrica y las energías renovables, entre otras”, señala Manuel de Francisco Peláez.

Una quitanieves de Serveo. Serveo

Empresa referente en el sector

Además, la compañía colabora con su cadena de suministro para incorporar en sus actividades productos más sostenibles, menos tóxicos, procedentes del reciclado o reciclables y realizando los trabajos con la máxima eficiencia. “En este sentido, analizamos los procesos y aplicamos metodologías que redundan en un menor uso de recursos, tiempos y, en definitiva, emisiones. Incorporamos innovación, tecnología que permite una mejor planificación de tareas, rutas, asistencia…”. Ejemplo de ello es el desarrollo de aplicaciones como XpertTRaffic (plataforma que permite optimizar los tiempos de respuesta ante incidentes) o el uso de drones para la inspección de puentes, viaductos o de taludes que pueden tener riesgo de desprendimientos. Esto permite realizar una inspección con fotografías y con cámara termográfica para detectar humedad o agua en los taludes.

A corto y medio plazo, sigue teniendo un papel protagonista en la hoja de ruta de la compañía la apuesta por la digitalización, la tecnología y el desarrollo de nuevas aplicaciones que mejoren la eficacia y la seguridad de las labores de conservación y mantenimiento. Es el camino para conseguir el que, como subraya Manuel de Francisco, es el objetivo de Serveo en esta región: “Seguir siendo una empresa de referencia en el sector”.

 SERVEO: nuevo nombre, misma esencia

Serveo, la compañía conocida hasta ahora como Ferrovial Servicios, ha comenzado una nueva etapa tras la entrada de un nuevo accionista: Portobello Capital. Cambia el nombre, pero mantienen su esencia a través de la gestión de activos estratégicos en sectores esenciales (salud, energía, transporte, industria y facility management). En el sector transportes, Serveo se ocupa de la conservación, el mantenimiento y la gestión de infraestructuras críticas, entre ellas casi 5.500 km de carreteras y túneles.