- La guerra de Ucrania, la huelga de transportistas, así como la falta de algunas materias primas y componentes ha pasado factura a la industria vasca, que ha registrado un incremento del paro en marzo, especialmente en Gipuzkoa. En el conjunto de la CAV, el número de desempleados creció en 1.270 personas con relación al mes de febrero, lo que supone un aumento del 1,1% hasta alcanzar las 117.085 personas. Y el sector industrial, el que mayor peso tiene en la economía vasca, fue donde más ha subido el desempleo con respecto al mes anterior, en concreto, un 2,2%.

“A nadie se nos oculta las circunstancias que estamos viviendo, y el mes de marzo especialmente ha sido extraordinariamente complicado”, destacó el viceconsejero de Empleo e Inclusión, Alfonso Gurpegui, durante la rueda de prensa en la que valoró, junto a la viceconsejera de Trabajo, Elena Pérez, los datos de marzo. “La guerra de Ucrania, además de sus consecuencias trágicas, ha dejado unas consecuencias económicas en el conjunto de Europa y muy significativamente entre nosotros”, apuntó.

De hecho, según explicó, el incremento del paro “ha sido mayor en el sector industrial, entre hombres, entre jóvenes y en Gipuzkoa, exactamente en los ámbitos y sectores de población donde la recuperación se había mostrado más sólida hasta ahora”. Según el viceconsejero, ha sido el sector industrial, además de la economía doméstica, “el que más ha sufrido no solo los altos costes energéticos, que vienen de antes, sino la carestía de las materias primas, el parón del transporte, la dificultad de encontrar suministros y la posibilidad de distribuir la producción”.

Sin embargo, los datos interanuales apuntan a un descenso del paro: con respecto a marzo de 2021, en Euskadi hay 12.936 parados menos (-9,95%). Otro dato a destacar es que se ha logrado el “máximo histórico” en contratación indefinida”, que alcanza el 21,49% del total de 71.669 contratos firmados el mes pasado, frente al 9,9% del cierre del año pasado, cuando no se había aprobado la vigente reforma laboral. De los contratos firmados, 15.401 fueron indefinidos, 4.883 más que en febrero, y 56.268 fueron temporales.

“El punto de inflexión sin duda ha sido la reforma laboral, cuyo periodo transitorio ha finalizado el jueves pasado”, lo que significa que “las empresas no han apurado y se han ido adaptando poco a poco durante el último trimestre”, valoró Gurpegui. Y esto, indicó, se acompasa de unos datos de afiliación a la Seguridad Social con 4.739 personas más, “lo que nos acerca de nuevo a los niveles más altos registrados en Euskadi”, que se produjeron en julio de 2008 cuando se alcanzaron las 982.935 personas, mientras que a fecha de hoy hay 980.808 cotizantes. Además, subrayó que la cifra de personas que buscan empleo y no lo encuentran -117.085- está “por debajo de las que había en febrero de 2020, antes de que estallara la crisis de la pandemia, de la que conseguimos remontar con rapidez y solidez”.

Por su parte, la viceconsejera de Trabajo, Elena Pérez, destacó que una de las cosas “más impactantes” ocurridas en marzo ha sido “la gran preocupación generada por la guerra en Ucrania, la imposición de sanciones económicas a Rusia, la imposibilidad de operar con ese país o con Ucrania a quienes tuvieran sedes allí, los precios energéticos, el coste de materias primas, el paro de los transportistas, la falta de suministros, la imposibilidad de sacar la producción”.

Según Pérez, “la gran mayoría de las empresas están sorteando esta situación con medidas propias de flexibilidad en el empleo, previstas en los respectivos convenios o acuerdos laborales, o, en su caso, con solicitudes de ERTE que exigen una negociación previa entre la dirección y la representación de los trabajadores”. Así, marzo ha registrado 21 ERTE de fuerza mayor, la mayoría relacionados con el paro de los transportistas, y 402 ETOP, destacando entre todas las causas las productivas, que alcanzaron 156.

Aunque hay expedientes en prácticamente todos los sectores, los tres más afectados son la fabricación de productos metálicos con 73 expedientes, los servicios de comidas y bebidas con 30 y la fabricación de vehículos a motor con 29. El total de 423 ERTE, apuntó Pérez, protegen a 25.213 trabajadores, de los que 19.920 son hombres.

Más paro. El paro en Gipuzkoa sigue afectando más a las mujeres -con 17.756 (222 más que en febrero) desempleadas- que a los hombres, que son un total de 13.395, si bien la subida de parados entre estos ha sido de 325, mayor que en el colectivo femenino, debido a la crisis que atraviesa el sector industrial derivada de la guerra de Ucrania, la huelga del transporte y la falta de determinados componentes. Los sindicatos lamentaron que las mujeres sean “mayoría en desempleo”, un 58% del total.