- Los trabajadores de la empresa MMI Prodema de Legorreta llevarán a cabo durante esta semana paros de dos horas por turno, de cuatro la próxima y una huelga indefinida a partir de la última semana de julio ante el “bloqueo” de la negociación en la que se encuentra el convenio colectivo.

LAB señaló ayer que ha pasado más de año y medio desde que finalizó la vigencia del anterior convenio. A pesar de que “no ha aceptado casi ni una” de las reivindicaciones de la plantilla, la dirección ha trasladado a los delegados de este sindicato un “último planteamiento” y ha asegurado que “no está dispuesta a negociar más”, según el sindicato.

Esta propuesta “no satisface” las “mínimas pretensiones” de los trabajadores ya que “no asegura un incremento salarial digno”, “no contempla la bajada de la jornada anual ni poner límites a la opción de establecer la jornada de modo irregular”, lamentó. Ante esta situación, el comité de empresa reclamó a la dirección un “cambio de actitud” y “muestras de su voluntad negociadora” al tiempo que remarcó que “si no hay avances” seguirán con el calendario de paros.

Por su parte, los trabajadores de la empresa Stadler en Oñati llevaron a cabo ayer un paro de 24 horas para protestar por los 12 despidos anunciados por la dirección y anunciaron un paro indefinido a partir del 16 de julio si “no cambia de actitud”. LAB indicó que el paro tuvo un “seguimiento total”, tras el realizado el pasado 8 de julio en esta empresa dedicada a la automoción con 63 trabajadores.