CCOO y UGT de Euskadi han coincidido este jueves en exigir al Gobierno de España que no permita el "veto" de la patronal a una subida del Salario Mínimo Interprofesional (SMI) en la misma medida en que están aumentando los convenios colectivos.

Varias decenas de personas se han concentrado en las tres capitales vascas en el marco de las movilizaciones convocadas por estos dos sindicatos bajo el lema "Ahora sí toca" para exigir, además de la subida del SMI, la derogación de las últimas reformas laborales y de pensiones.

La de Gasteiz se ha celebrado frente a la sede de la Delegación del Gobierno en el País Vasco, y en ella han participado los dos máximos responsables de CCOO y UGT en Euskadi, Mari Cruz Vicente y Raúl Arza, respectivamente.

Vicente ha dicho que no hay ninguna justificación para que el SMI no se incremente este año y ha advertido de que "no se puede cargar el peso de esta crisis sobre aquellos sectores más desfavorecidos, aquellos que están afectados por este salario".

"En el SMI se le ha intentado dar derecho de veto a la patronal de este país y eso las organizaciones sindicales no podemos consentirlo bajo ningún concepto", ha sentenciado.

Vicente ha recordado que la mesa de relaciones laborales tenía avanzado aspectos relevantes en torno a la reforma laboral de 2012, como la recuperación de la ultraactividad de los convenios, la prevalencia del convenio sectorial sobre el de empresa, la regulación de las contratas y la modificación de la regulación de las inaplicaciones de los convenios.

A su juicio, "no hay justificación" para que estos cambios sigan paralizados, por lo que será una cuestión previa a cualquier otra materia que se quiera plantear en la mesa de diálogo social.

CUMPLIMIENTO DE COMPROMISOS

Por su parte, Arza ha explicado que estas movilizaciones son para pedir que se cumplan "los compromisos electorales que se plasmaron en un acuerdo de Gobierno" español, un Ejecutivo que, ha dicho, "tiene una mayoría más que suficiente en el Congreso para abordar las tres reivindicaciones" de los sindicatos.

Ha recordado que sobre el SMI hay un compromiso por parte del Gobierno estatal de llegar a final de legislatura al 60% del salario medio para cumplir la Carta de los Derechos Sociales en Europa, por lo que "un año de congelación va a dificultar llegar a ese objetivo".

"No entendemos cómo el Gobierno le ha dado poder de veto a la patronal", ha recalcado Arza, que se ha preguntado "qué empresas hay en este país que por el mero hecho de subir el SMI digan que se van a poner en riesgo más de 130.000 puestos de trabajo".

Arza ha recordado que las subidas que ha habido en años anteriores han demostrado que esos "augurios" de la patronal no se han cumplido y ha anunciado que no van a parar hasta que consigan esa subida este mismo año.

Ha recordado que las movilizaciones son también para demandar la derogación de la reforma laboral que "está permitiendo que muchas empresas puedan despedir a los trabajadores por el mero hecho de tener menores ingresos o de ganar menos que el año anterior".

Por último, ha recordado la reivindicación de la derogación de la reforma de las pensiones de 2013, que "abarató de nuevo las pensiones". "Le exigimos al Gobierno que no emplee ninguna triquiñuela para no vincular la revalorización de las pensiones al IPC y que derogue de una vez el factor de sostenibilidad".